• Se investiga si líderes venezolanos han usado PDVSA para saquear miles de millones de dólares del país a través de sobornos y otros ardides.
  • También, si PDVSA y sus cuentas bancarias en el extranjero fueron utilizadas para otros fines ilegales, incluidos el manejo de divisas en el mercado negro y el lavado de dinero del narcotráfico.
  • Los funcionarios venezolanos han rechazado sistemáticamente las denuncias de corrupción oficial como intentos de desestabilizar y derrocar al Gobierno chavista: vamos, lo de siempre.
Las autoridades estadounidenses han puesto en marcha una serie de investigaciones de amplio alcance sobre la posibilidad de que líderes venezolanos hayan usado PDVSA para saquear miles de millones de dólares del país a través de sobornos y otros ardides. Las investigaciones, realizadas por agencias federales en varias jurisdicciones de Estados Unidos, también tratan de determinar si PDVSA (Petróleos de Venezuela S.A.) y sus cuentas bancarias en el extranjero fueron utilizadas para otros fines ilegales, incluidos el manejo de divisas en el mercado negro y el lavado de dinero del narcotráfico, dicen estas personas, informa TWSJ. A principios de este mes, fiscales federales en Nueva York, Washington, Missouri y Texas y agentes del Departamento de Seguridad Nacional, la Administración de Control de Drogas (DEA), el FBI y otras agencias se reunieron en persona o por teleconferencia en Washington para coordinar acciones y compartir pruebas y testigos para las diversas investigaciones sobre PDVSA, según tres personas con conocimiento del asunto. Aunque las autoridades estadounidenses no han hecho todavía ninguna acusación pública sobre PDVSA. Los funcionarios venezolanos han rechazado sistemáticamente las denuncias de corrupción oficial como intentos de desestabilizar y derrocar al Gobierno de Nicolás Maduro por parte de figuras de la oposición aliadas con EEUU y otros "enemigos extranjeros". Vamos, la excusa chavista de siempre. Pero los chavistas también tienen pecado original... Las investigaciones tienen lugar en momentos en que la economía de Venezuela está en camino de una contracción de 10% este año y una inflación de 160%, según las más recientes estimaciones del Fondo Monetario Internacional. El país está paralizado por el colapso de su moneda, una industria moribunda y la incapacidad de pagar importaciones de medicinas y alimentos. Es decir, un auténtido desastre para los venezolanos, que espetan con ansia un cambio de régimen. Andrés Velázquez andres@hispanidad.com