- La Gran Logia de España ha cedido al Centro Documental de la Memoria Histórica más de 40.000 documentos originales pertenecientes fundamentalmente al Grande Oriente Español en el exilio.
- Abarca el periodo comprendido entre la guerra civil y los años setenta.
- Pero como la masonería ha sido y es una organización secreta, no se sabe quiénes son o fueron masones.
- Y no se puede odiar a quien no se conoce…
La
Gran Logia de España ha cedido al Centro Documental de la Memoria Histórica más de 40.000 documentos originales pertenecientes fundamentalmente al
Grande Oriente Español en el exilio, que abarca el periodo comprendido entre la guerra civil y los años setenta.
"Con esta nueva cesión, la
Masonería Española quiere facilitar el estudio de nuestro exilio en el periodo de mayor persecución de la Orden en España. El antiguo Archivo de Salamanca, epicentro de la persecución más sistemática, prolongada y eficaz que ha padecido nunca la Masonería en Europa Occidental, preserva hoy, como Centro de la Memoria, el recuerdo de la masofobia que fue común a todos los totalitarismos del siglo XX", ha explicado el
Gran Maestro Óscar de Alfonso.
El Archivo de Salamanca, la colección de documentos masónicos incautados más extensa del mundo, sirvió para alimentar esa maquinaria. El Estado reconoció hace años ya la propiedad de todos ellos a la Gran Logia de España y la Masonería Española desea que se queden donde están, en el actual Centro Documental de la Memoria Histórica,
para ayudarle en su propósito de que no se olvide dónde y porqué fueron acumulados. Cada papel, cada fotografía, cada ficha, cada acta se utilizó, con la fría eficacia funcionarial propia de los totalitarismos, para identificar y depurar a masones que defendían principios que hoy inspiran al mundo.
"Hoy,
en las sociedades democráticas que amparan y protegen a la Masonería, las redes sociales registran a diario expresiones de masofobia y la persecución institucionalizada continúa siendo un hecho en una treintena de países del mundo dominados por el integrismo religioso o el totalitarismo político", explica la Gran Logia de España.
"La masofobia es el odio a la Masonería y a sus principios, que conducen a una vida más fraternal entre los hombres, tolerando todas las creencias y opiniones honradamente profesadas", continúan los masones españoles.
Pero lo curioso es que la masonería hable de 'masofobia'. Porque los masones no se sabía quiénes eran , pues era -y es- una organización secreta. Así que ¿odio.., a quién?
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com