• La digestión de la Reforma Soria ya está hecha.
  • Aumenta la producción pero no baja el apalancamiento.
  • Al final, Galán ha conseguido rentabilizar su onerosa compra en Estados Unidos.
  • En definitiva, cifras modestas pero buenas perspectivas tras el bache en España.
Después de dos ejercicios todo  parece indicar que el sector eléctrico ha sido capaz de hacer la digestión de la reforma eléctrica del ex ministro Soria, asimilando la cuenta de resultados los efectos de tan doloroso proceso, recuperando las cifras contables los beneficios de antaño. Este es el caso de Iberdrola que, en la presentación de resultados del  primer trimestre del ejercicio refleja unos resultados por encima de las expectativas de los analistas, aunque no de todos, que los hay muy optimistas. Por suerte para el sector, al menos  a corto plazo, no contamos con Gobierno, por lo que la incómoda digestión ha debido ser una piedra en el camino que no debería ser recurrente. O quizá no, algunas propuestas políticas se plantean la posibilidad incluso de nacionalizar parte del sector eléctrico por su papel estratégico, no  limitándose a promover los denominados bonos sociales. Las elecciones dirán, o quizá no, quién sabe. Como hemos comentado, Iberdrola ha batido algunas, no todas, las previsiones, reflejando un beneficio en el primer trimestre del año de 869 millones, un 3,3% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior, iniciando la senda correcta para alcanzar un crecimiento del 5% a lo largo del año que marca como objetivo estratégico. En concreto, el beneficio recurrente alcanzado los 837 millones, un aumento del 5,1 %. En términos absolutos el resultado bruto de explotación se eleva a 2.008 millones de euros un 6% menos derivado de los resultados no habituales, resultados que probablemente se recuperarán a lo largo del ejercicio. La evolución del resultado revela la importancia del sector exterior y de las diferentes áreas de negocio, en la medida que los resultados de Avanfrid, la filial de EEUU, aporta nada más y nada menos que 212 millones de dólares, un 24% más. Sin embargo, el resultado neto de explotación queda fijado en 1.249,5 millones frente al dato anterior de 1.343,8 millones. Las cifras de ventas, en este escenario, se establecen en 8.184 millones frente al dato del ejercicio anterior de 8.780 millones con un ligero aumento del margen bruto. La ratio Gasto Operativo Neto / Margen bruto evoluciona desde el 23,63% al 26,04% en el presente ejercicio, con un mayor peso del gasto operativo sobre los beneficios brutos de la entidad.  Los Fondos Generados en Operaciones a cierre del trimestre crecen un 2,3% y se sitúan en 1.696 millones de euros. Por lo que respecta a la actividad, determinante del resultado del ejercicio, se pone en evidencia un aumento de la producción neta en el 6,2% en el que destaca la producción hidroeléctrica con un aumento de más del 38%, aumento donde sin duda puede tener su importancia el comportamiento meteorológico de los últimos meses. Estos datos, que se refieren al mercado español, contrastan con la información obtenida en el Reino  Unido donde, a modo de ejemplo, la producción total disminuye (-8.3%) con un aumento interesante en la producción derivada de los ciclos  combinados de gas, un 27% más que en el periodo anterior. Desde el punto de vista del activo la entidad ha aumentado de manera importante las inversiones, con un 50% más respecto al año anterior, hasta cifras iguales a 896 millones, inversión toda ella dedicada a un aumento de capacidad productiva. La Deuda Neta se sitúa en 28.274 millones de euros, aumentando en 1.969 desde marzo 2015 debido fundamentalmente a la consolidación de UIL. A pesar de ello, el apalancamiento financiero se mantiene prácticamente plano en el 41,3% frente al 41,2% del mismo período del año anterior, consecuencia de unos recursos propios de 40.167 millones de euros. Aun así el peso relativo de la deuda neta sobre fondos propios se elevan al 70.4% frente al 68,5% del año anterior. Finalmente considerar el comportamiento del capital circulante con una disminución de 22 millones de euros desde marzo de 2015, consecuencia del hecho de que los saldos activos y pasivos con Administraciones Públicas suponen un aumento del circulante de 200 millones de euros y una disminución de existencias de 196 millones. Rodrigo de Silos rodrigode@hispanidad.com