Protestas en Hong Kong contra la dictadura comunista
El Parlamento chino -el dominado por el régimen comunista, vamos- anunció el jueves su intención de examinar rápidamente una ley destinada a reprimir a los opositores al poder central, a raíz de las gigantescas protestas prodemocracia que sacudieron Hong Kong el año pasado.
El jefe de seguridad de Hong Kong John Lee -que es prochino- dijo que el "terrorismo" estaba creciendo en la ciudad, después de que miles de personas salieran a las calles para protestar contra los planes de Pekín para introducir leyes de seguridad nacional que servirían para acabar con las libertades en la excolonia británica, recoge Swissinfo.
"En sólo unos meses, Hong Kong ha pasado de ser una de las ciudades más seguras del mundo a ser una ciudad envuelta en la sombra de la violencia", dijo, añadiendo que se necesitaban leyes de seguridad nacional para salvaguardar la prosperidad y la estabilidad de la ciudad.
La policía dijo que detuvo a más de 180 personas el domingo, cuando las autoridades dispararon gas lacrimógeno y cañones de agua para dispersar a los manifestantes antigubernamentales, mientras los disturbios volvían a la ciudad gobernada por China después de meses de relativa calma. Se escucharon cantos como ‘La independencia de Hong Kong, la única salida’.
Se escucharon cantos como ‘La independencia de Hong Kong, la única salida’
Los clamores por la independencia son un anatema para Pekín, que considera a Hong Kong una parte inseparable del país. El nuevo marco de seguridad nacional propuesto subraya la intención de Pekín de "prevenir, detener y castigar" tales actos.
Australia, Reino Unido, Canadá y otros países han expresado su preocupación por la legislación, considerada en general como un posible punto de inflexión para la ciudad más libre de China y uno de los principales centros financieros del mundo.
Taiwán, que se ha convertido en un refugio para un pequeño pero creciente número de manifestantes pro-democracia que huyen de Hong Kong, proporcionará al pueblo de Hong Kong "la asistencia necesaria", dijo la presidenta Tsai Ing-wen.
Estados Unidos renovó el domingo su advertencia a China contra un proyecto de ley sobre "traición, secesión, sedición y subversión" en ese territorio semiautónomo
Y tras un día de enfrentamientos en Hong Kong, Estados Unidos renovó el domingo su advertencia a China contra un proyecto de ley sobre "traición, secesión, sedición y subversión" en ese territorio semiautónomo, que a juicio de un asesor del gobierno de Donald Trump podría perder su estatuto comercial privilegiado, añade Swissinfo.
El asesor de seguridad nacional estadounidense Robert O'Brien recordó en una entrevista que China se comprometió en 1984, en la Declaración Conjunta chino-británica, a respetar la autonomía de Hong Kong hasta 2047, tras la retrocesión británica del territorio en 1997.
El viernes, el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, ya había advertido a Pekín y amenazó veladamente de no certificar que China respeta los compromisos asumidos en el marco de la Declaración chino-británica, que rige el estado de autonomía de la antigua colonia británica.
Esta certificación, que el gobierno estadounidense debe remitir en corto tiempo al Congreso, permitiría a Hong Kong mantener su estatus preferencial, especialmente en asuntos comerciales, otorgado en 1992.