Fue Trump, el primero en hablar del virus chino y fue fusilado por ello. De entrada, por racista. Ahora es Joe Biden quien encarga a la CIA que investigue si hablamos de negligencia china o de mala uva china
El taxista no deja de ser una de los biotipos más certeros de Juan Español. El de hoy me ha soltado un discursito parecido a esto: “ En junio ya me toca vacunarme pero yo estoy convencido que hay algo que no nos cuentan”. Uno diría que nuestro taxista representaba el sentir nacional.
En eso se basa la consigna monclovita: los españoles, ciertamente, ya están domesticados pero no será el Gobierno central quien imponga más restricciones. Podría estallar la rebelión. Si ha de haber víctimas, que sean los gobiernos regionales.
¿Han sido las vacunas las que han detenido el avance del virus?
Y más preguntas: ¿han sido las vacunas las que han detenido el avance del virus? Se empieza a percibir un cansancio del virus, no porque hayan aumentado las restricciones, de hecho, están disminuyendo. A lo mejor es que el ciclo de vida del Covid ultracontagioso se acaba. Morir no morirá, que en la lucha entre el hombre y el microbio siempre gana el microbio, pero lo cierto es que el microbio no existe y que persiste la desconfianza general sobre el método de contrarrestar el virus o, simplemente, sobre las mentiras que llevamos escuchando desde hace 15 meses.
La caradura de Biden: encarga a la CIA que investigue. Negligencia china o mala uva china
Hablando de caraduras: Joe Biden basó su campaña electoral en atacar a Donald Trump con la pandemia… bueno, y con el Black Lives Matter.
Fue Trump, el primero en hablar del virus chino y fue fusilado por ello. De entrada, por racista. Ahora es Joe Biden quien encarga a la CIA que investigue si hablamos de negligencia china o de mala uva china. Y quiere la respuesta en tres meses. Pero claro, ahora se trata de saber la verdad, ni asomo de racismo.