El revuelo fue máximo el viernes, en la planta 11 de la Vela, la sede del BBVA, en el madrileño barrio de Las Tablas, cuando los presentes comprobaron que uno de los comensales era el mismísimo Luis del Rivero, ex presidente de Sacyr que en su día pretendió el asalto al banco y que en la última Junta de Accionistas exigió al Consejo de Administración que colaborara, de una vez por todas, con la Justicia en el caso Villarejo.

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Precisamente, la presencia de Del Rivero -algunos no se lo podían creer- adquiere una mayor relevancia porque el lunes anterior, Carlos Torres, con quien Del Rivero no mantiene precisamente una relación de amistad, declaró como testigo ante el juez Manuel García-Castellón y respondió a las preguntas del fiscal Alejandro Cabaleiro. Qué causalidad que cuatro días después, Del Rivero coma en la sede del BBVA.

¿A qué fue?:

  1. A pactar con Torres.
  2. A pegar a Torres.
  3. A buscar aliados contra Torres.
  4. A todas las anteriores.

Se admiten apuestas. Mientras tanto, el PNV está dispuesto a ‘ayudar’ a destituir a Torres como presidente y exige participar en el nombramiento de su sucesor.