
'Aló presidente', desde La Moncloa, en vísperas del Día del Trabajador, se enorgullecen: "Los ingresos por cotizaciones a la Seguridad Social crecen un 7,6% interanual, hasta alcanzar los 43.319 millones de euros (3.056 millones más que el año anterior)".
Los ingresos correspondientes al Mecanismo de Equidad Intergeneracional, en vigor desde el 1 de enero de 2023, registran un incremento interanual del 31,5%, alcanzando 1.094 millones de euros que nutren el Fondo de Reserva de la Seguridad Social, continúan desde el Ministerio capitaneado por Elma Saiz.
Si se toman como referencia los datos del último ejercicio que no estuvo afectado por la pandemia del Covid, 2019, el incremento de las cotizaciones es de 12.752 millones de euros (un 41,72% más). En el análisis mensual comparativo se observa que en marzo los ingresos por cuotas se cifraron en 14.416 millones de euros, 3.974 millones de euros más que el mismo mes de 2019.

Y esto es bello e instructivo, máxime cuando hace dos días conocimos la EPA del primer trimestre. El paro se disparó 193.700 personas entre enero y marzo del 2025, lo que implica su mayor subida en un primer trimestre desde 2013, el desempleo ha aumentado un 7,4% con respecto a los tres meses anteriores. En resumen, una EPA para no recordar.
Pese a los datos de paro y a que seguimos siendo líderes en desempleo del mundo mundial, Yoli insiste en la reducción de la jornada y Marisu y Elma en recaudar más y más por las cotizaciones sociales, que ya son las más altas de toda Europa, pagadas por trabajador, empleador y familias.
Desde que Sánchez llegó al poder, en estos tormentosos, eternos y turbulentos siete años, las cotizaciones sólo han subido, sin que, evidentemente, el trabajador vea un céntimo de estos aumentos. Contratar legalmente se vuelve misión imposible, y eso sólo acaba en despidos, economía sumergida, parando las contrataciones y con salarios míseros.
En cualquier caso, ¿no sería más lógico que lo que le pagamos a doña Yolanda Díaz y a doña Elma Saiz, verdaderos pozos sin fondo, se lo pagáramos a los empleados? ¿No sería mejor subir el salario líquido y reducir o anular las cuotas sociales?