Decíamos tras los resultados de los nueve primeros meses del año, que el BBVA es cada día más dependiente de México y más castigado por Turquía, y que eso no es bueno. Lo primero se sigue cumpliendo y lo segundo… también, aunque con algún matiz.

Porque Garanti ha mejorado, al menos en su cotización, que se ha disparado algo más de un 160% desde enero. La filial turca del BBVA vale actualmente en bolsa unos 6.330 millones de euros, 1.300 millones más que en septiembre, pero menos que lo que pagó el BBVA por ella: unos 9.000 millones de euros.

En cualquier caso, aunque haya mejorado su valor en bolsa, el BCE, al que no le gusta que el BBVA haya invertido el equivalente al 17% de su capital en la filial, no pierde de vista el entorno ‘erdoganiano’ en el que se mueve Garanti, sujeto, como toda la economía de aquel país, a las ocurrencias y decisiones de Erdogan. Por ejemplo, con una inflación galopante, el presidente turco decretó hasta cuatro bajadas de tipos de interés, hasta situarlos en el 9% -22 de diciembre-, mientras la inflación de octubre conquistaba el 85,5%.

El CEO del BBVA, Onur Genç, puede darse un respiro y terminar el año con algo de optimismo, al menos gracias a la cotización de Garanti. Ahora bien, tampoco le conviene relajarse en exceso porque el interés por relevarle en el cargo continúa vivo.