American Express no aprovechó el auge del pago con tarjeta que trajo el Covid-19, pues ganó un 54% menos en 2020 al aumentar provisiones, pero ha empezado a enmendar el rumbo. Y es que ha septuplicado el beneficio neto hasta junio, obteniendo 3.830 millones de euros, gracias, entre otras cosas, a haber liberado crediticias y a no tener el impacto negativo de las provisiones.

La empresa estadounidense de tarjetas de crédito y soluciones de pago ha aumentado sus ingresos un 7,3%, a 16.380 millones, en el primer semestre. En esto ha contribuido el registro de un impacto positivo de 1.087 millones por las menores provisiones, en lugar de uno negativo de 3.543 millones que tuvo hace un año.

American Express ha tenido unos “sólidos resultados del segundo trimestre”, en palabras de su presidente y CEO, Stephen Squeri, que reflejan cómo los pasos que han tomado “para gestionar durante la pandemia y la estrategia de inversión para reconstruir nuestro impulso de crecimiento están dado sus frutos”. Entre abril y junio, la compañía ha ganado 1.934 millones, casi nueve veces más, tras haber liberado 735 millones en reservas crediticias y un pacto positivo de 514 millones en el riesgo de crédito, y ha disparado un 33,4% sus ingresos, hasta 8.690 millones.