En Amazon, su fundador y presidente ejecutivo, Jeff Bezos, sigue a lo suyo con un pinchazo (pérdidas de 2.993 millones de euros por culpa de Rivian en los nueve primeros meses y desplome del beneficio operativo en 11.971 millones, pese a crecer en ventas netas) aprovechado. Este miércoles, inicia el despido de 18.000 empleados, pese a tener el cuasi monopolio del comercio electrónico mundial y convertirse en la marca más valiosa en 2022.

El gigante estadounidense de comercio electrónico prescindirá del 6% de su plantilla del área corporativa, que en total asciende a unas 300.000 personas, pero aún no se sabe si habrá afectados en España. El ajuste se argumenta aludiendo a “la economía incierta” y al hecho de que había “contratado rápidamente en los últimos años”. Esto último es fallo suyo, pero pagarán los de siempre. En relación a esas contrataciones, es cierto que los ingenieros informáticos tienen muy buenas condiciones (son los profesionales clave del negocio), aunque no ocurre lo mismo con el resto: por ejemplo en España, donde la precarización laboral se puede ver en el uso de Empresas de Trabajo Temporal (ETT), en el incumplimiento de compromisos... y en la creación de mal ambiente en el centro logístico de San Fernando de Henares.

En el ranking Global 500 tras Amazon están Apple, Google, Microsoft y Walmart; y aparecen siete españolas: Santander, Zara, Movistar, BBVA, Mercadona, Caixabank y Repsol

Y hablando de nuestro país, por mucho que Amazon presuma de contrataciones, hay que referir que cerrará el centro logístico de Martorelles (Barcelona), con 800 trabajadores. Ya está negociando con los representantes de los empleados para trasladarles a otros centros grandes o más pequeños y más próximos a las poblaciones donde sirve y no contempla, por ahora, ningún plan de bajas voluntarias ni despidos. En paralelo, abrirá dos nuevos centros logísticos: uno en la plataforma logística de Zaragoza en marzo y otro en Far d’Empordà (Gerona) en abril, donde creará 1.000 y 1.500 empleos en los tres próximos años, respectivamente. “Seguimos invirtiendo en nuestra red de centros a lo largo del país para satisfacer la demanda de los clientes”, ha presumido Fred Pattje, director de Satisfacción del Cliente de Amazon en España, añadiendo que “los nuevos centros logísticos de Zaragoza y Far d’Empordà subrayan nuestro compromiso con el país, donde ya empleamos a 20.000 personas con talento con una amplia variedad de puestos de calidad, desde ingenieros en robótica a profesionales de tecnologías de la información (IT) y especialistas en finanzas, pasando por los equipos que recogen, empaquetan y envían los pedidos a los clientes”. 

18.000 despidos en Amazon, a pesar de que ha arrebatado a Apple el primer puesto como la marca más valiosa del mundo en el ranking Global 500 que elabora la consultora Brand Finance y su valor ha caído un 4% a 288.500 millones de euros. Tras el gigante estadounidense de comercio electrónico y la multinacional tecnológica de la manza mordida, se sitúan Google (ha frenado nuevas contrataciones), Microsoft (como Amazon, apuesta por los despidos, que ahora ha elevado a unos 10.000) y Walmart. Dentro del ranking Global 500 hay siete marcas españolas: Santander, Zara, Movistar, BBVA, Mercadona, Caixabank y Repsol. En paralelo, Iberdrola y Siemens Gamesa se han situado entre las primeras 25 compañías del índice 'Global 100 Most Sustainable Corporations in the World' que elabora la publicación Corporate Knights, siendo las empresas españolas presentes en dicha clasificación.