Iberdrola es la eléctrica que ha tomado la ideología de género como bandera. Mientras se mantuvo en el patrocinio del deporte femenino todo fue bien, pero ahora, con motivo de los Reyes Magos, lanzó una campaña en las redes sociales contra los juguetes sexistas… que no ha sido bien acogida por el público a tenor de los comentarios que pueden leer a continuación, como respuesta a un tuit que publicaron la noche del pasado 4 de enero con el vídeo en cuestión:

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Total, que Iberdrola retiró la campaña el día 5. Pero ojo, porque únicamente retiró el tuit del día 4 y no el que publicó, con el mismo vídeo, unas semanas antes, el 17 de diciembre. Es más, el hombre que revolucionó el twitter de la Policía Nacional y que fichó Iberdrola en 2015, Carlos Fernández Guerra, ya publicó el controvertido 'spot' en diciembre de 2017 y logró un aluvión de comentarios críticos con Iberdrola. Es la filosofía de Fernández Guerra: cuanto más ruido, mejor, aunque sean comentarios negativos. Y es que la ideología de género puede quedar bien en un terreno mediático pero una cosa es esa y otra, bien distinta, que tu compañía suministradora de electricidad te diga cómo tienes que organizar tu casa.

Un error de imagen, sin duda, pues la mayoría de los comentarios hacen relación al precio de la luz (subió un 2,2% de media en 2018 y se prevé que lo haga un 8% en 2019) y hay una idea motriz: “Dejad a los niños en paz”.

El feminismo puede resultar políticamente correcto, pero no popular

Si algo preocupa a bancos, telecos y compañías energéticas es su reputación corporativa.

Y resulta que una cosa es la opinión publicada y otra, lo que piensa el público. En cualquier caso, en Iberdrola han aprendido que lo políticamente correcto también tiene sus riesgos. Puede toparse con el cansancio de la gente.