La última tontuna del ochomarzismo es el Jesucristo feminista. Verbigracia: la última película chorras, la de María Magdalena, presenta a un Jesús de Nazaret medio lelo, cuya aparente novia, la tal María Magdalena, es una intelectual de mucho fuste, que teledirige al maromo, -varón, es decir, pelín ‘fumao’ y tonto de baba- con una profundidad teológica que para sí quisiera el Aquinate. 

El feminazismo puede ser peligroso, pero el femicretinismo lo es mucho más. Y está mucho más extendido. 

Entre las feministas y entre los feministos.