En Hispanidad les hablamos de una serie de investigación de tres partes de Project Veritas, denominada “Demasiado joven”, que iba a ser publicada para denunciar cómo las clínicas ofrecen servicios destinados para adultos a menores, en la primera entrega pudimos ver que ofrecían bloqueadores de la pubertad a niños de 14 años o menos.

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En la segunda entrega, se puede ver como el gigante abortero Planned Parenthood ofrece abortos a niñas menores de 13 años. En el vídeo de ocho minutos de duración, un periodista que se hace pasar por la madre de una niña que quiere abortar habla con empleados de centros abortistas. La enfermera primero les explica la facilidad que pueden pagar el aborto: "Tenemos un montón de planes que nos da el gobierno", llega a asegurar, además, afirma que no se exige "documentación" que demuestre que la supuesta madre "es pariente" de la niña. 

A la pregunta de la periodista sobre si una menor puede acudir al centro abortista sin la presencia de sus padres, la enfermera responde con un rotundo "sí", reconociendo si problema que una niña de 13 años puede "acudir sin padres" a un centro abortista.

Durante la grabación, la directora gerente de un centro de Planned Parenthood en Kansas City (Misuri) explica que los empleados tienen todo un sistema preparado para que una menor pueda abortar sin el conocimiento ni el consentimiento, de sus padres.

"Tienen que pasar por todo un proceso para conseguir que los tribunales no intervengan si no queremos que los padres participen", se le explica a la periodista.

En otro vídeo se ve cómo le entregan a la periodista un documento en el que aseguran que "Hoy no podemos hacer nada, pero esto es lo que hay que hacer. Lo que puede hacer es conseguir un bypass judicial", que consiste en que un juez de permiso para abortar sin el consentimiento de los padres. Aunque todo son facilidades, desde el centro aseguran que el proceso es "gratis" y que "están obligados a dar prioridad a estos [casos]". Además, estos chicos tan altruistas y aborteros, afirman que reciben menores de otros estados donde no está permitido el aborto "todo el tiempo". 

También explica que las organizaciones "colaboran" con Planned Parenthood para facilitar los abortos fuera del estado, incluyendo ayuda financiera y de transporte.

Abby Johnson, la anterior miembro de Planned Parenthood, ahora activista provida, ha hablado sobre el documental asegurando que esto va más allá, que estaríamos ante una red donde se "entrena" al personal de la clínica para que las menores puedan abortar sin problemas: "Conocían a todos los jueces y tenían una relación con cada uno de los jueces que sellarían el consentimiento para que esta menor pudiera abortar", "Les daban a las chicas un guión que ellas leían al juez".