En las tertulias se ha comentado el discurso de Navidad del Rey y la situación política.
Isabel Díaz Ayuso (RNE): “A Pedro Sánchez le da igual que su país esté roto con tal de estar al frente del mismo”
En RNE, la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha dicho: "El gobierno de Sánchez va a contentar a los que piensan que es mejor romper la soberanía de todos los españoles y a los que quieren convertir otras comunidades autónomas en pequeñas repúblicas". "A Pedro Sánchez le da igual que su país esté roto con tal de estar al frente del mismo".
Fernando Ónega (Onda Cero): “De la misma forma que el PSOE consolidó a Juan Carlos I en 1982, a lo mejor Podemos legitima a Felipe VI 37 años después”
En Onda Cero, Fernando Ónega comentaba: “Lo que hizo Su Majestad ha sido un mensaje clásico, lleno de las palabras que suele haber en sus discursos: concordia, diálogo, trabajar juntos y cubrirnos con el manto de la Constitución.
Como corresponde a sus funciones, trató de no molestar a nadie y de no entrar de forma directa en los problemas políticos. Hay que leerlo entre líneas, como las señales del cielo, para saber que habló de todo, desde Cataluña a los riesgos extremistas, como un catálogo de sus "serias preocupaciones".
Los cambios sociales y tecnológicos fueron su escudo y disculpa. Y sus finalidades, estas dos: frente el pesimismo general, una llamada al optimismo basada en la realidad objetiva del país, un Estado fuerte y la vitalidad social.
Y frente a las incertidumbres, la palabra más repetida: confianza. Pero atención: es una confianza en la sociedad, una delegación en la sociedad y no en la clase política, del impulso que necesita este país.
Las respuestas y reacciones, otro clásico: rechazo independentista, porque el Rey representa la unidad del Estado, miserable alocución de Torra, aplauso constitucionalista.
Y la sorpresa, el tono de Echenique, que intuye "un mejor olfato político" en Felipe VI y dará para muchas interpretaciones. Como esta: ¿ha iniciado Podemos un viraje hacia la aceptación de la Monarquía?
De momento solo es un indicio. Pero interesante: de la misma forma que el PSOE consolidó a Juan Carlos I en 1982, a lo mejor Podemos legitima a Felipe VI 37 años después”.
Carlos Alsina (Onda Cero): “Cuesta entender que un discurso que se revisa tanto, incurra en el brochazo de confundir una realidad llamada Cataluña con los actos de un grupo de ciudadanos que residen en Cataluña”
En Onda Cero, Carlos Alsina opinaba: “El discurso tuvo como aroma de fondo el esfuerzo del Rey por no incomodar a nadie. Empezando por el gobierno en funciones y su presidente candidato. Huyendo en su discurso del laberinto político en que se ha metido Sánchez al elegir como pareja de baile a dos partidos que apoyan la autodeterminación, que pregonan que hay presos políticos en España y que sostienen que el 155 fue un atraco. Es decir, Podemos y Esquerra Republicana. Los dos patas en que se apoya Sánchez para renovar su contrato de alquiler en la Moncloa.
Y en ese afán de no molestar se produjo un derrape al hablar de la cuestión catalana.
Cuesta entender que un discurso que se prepara con tanta antelación, que se revisa tanto, en el que se mide cada palabra, incurra en el brochazo de confundir una realidad llamada Cataluña con los actos de un grupo de ciudadanos que residen en Cataluña. Sólo le dedicó el rey Felipe a este serial que marca el día a día de la política española ocho segundos. Éstos.
Y siendo una frase tan corta, y tan cargada (según los felipólogos) de contenido –-ese y desde luego como subrayado regio--, cuesta entender que el Rey dijera que preocupa Cataluña a España y no que preocupa en Cataluña y en el resto de España la persistencia de dos partidos políticos y un gobierno autonómico en desdeñar las reglas de la convivencia que rigen para todos.
Pilar García de la Granja (COPE): el discurso del Rey fue “ajustado, optimista, razonable”
En la COPE, Pilar García de la Granja apuntaba: “El Rey estuvo en su sitio, en un discurso como este, el del día de Nochebuena. A mí me da la sensación de que el Rey quería resaltar lo que a los españoles nos une, habla de la unidad, de las incertidumbres a las que nos enfrentamos. Ha explicado el proceso en el que nos encontramos con la elección del presidente del Gobierno, que esto sigue retrasándose y también esa preocupación que muchos sentimos, la gran mayoría, por lo que está sucediendo en Cataluña. Me parece que fue ajustado, optimista, razonable y que esto se explica mucho mejor cuando ves las reacciones de aquellos que no buscan la unidad de España, sino la desunión. Yo no esperaba otra cosa. No me imagino al Rey diciendo referéndum para Cataluña el día de Nochebuena”.
Antonio Naranjo (COPE): “Su discurso fue tan conciliador como para que Podemos por menos que se envolviera en la bandera de España y cantara el himno”
Antonio Naranjo opinaba: “Creo que el Rey se aplicó esa vieja frase de Séneca que decía que a veces es más conveniente disimular que vengarse. Y que no dijo del todo lo que pensaba, pero sí dijo lo que convenía. La cuestión está en a quién convenía. Parece claro que al Gobierno en funciones y el aspirante a presidente del Gobierno que es Pedro Sánchez. Tengo más dudas de si es el mensaje que necesitaba exactamente España”. “Yo pienso en el discurso anterior del Rey”. “Tengo la sensación de que la situación es más delicada ahora que entonces y sin embargo su discurso fue tan conciliador como para que Podemos por menos que se envolviera en la bandera de España y cantara el himno”.
José María Fidalgo (COPE): “Fue un mensaje muy certero; yo creo que no eludió ninguno de los temas que tenía que citar. Para mí lo hizo muy bien”
En la COPE, José María Fidalgo señalaba: “Fue un mensaje muy certero. Tenía una complicación, evidentemente, porque es un mensaje en unas presuntas vísperas de un presunto acuerdo para formar Gobierno. Y yo creo que no eludió ninguno de los temas que tenía que citar. Para mí lo hizo muy bien”.
Salvador Sostres (COPE): “Es lo que tiene que ser: un jefe de Estado que guía pero siempre desde su posición que le marca la Constitución”
Salvador Sostres destacaba: “Un discurso del Rey es muy difícil. Todo el mundo espera que no diga nada. Y dijo cosas. Es lo que tiene que ser: un jefe de Estado que guía pero siempre desde su posición que le marca la Constitución. O sea, que me pareció dentro de los equilibrios que tiene que hacer, muy correcto”.