Resumen de tertulias y entrevistas en radio y TV (03/09/2019)

En Onda Cero, Carlos Alsina subrayaba: “Sánchez en un salón de actos que tiene la estación interpretando el capítulo de hoy del serial 'por mí que no quede'. La campaña publicitaria del presidente para convencernos a todos de que él hace todo lo posible para que no haya elecciones de nuevo. Hoy mostrará al respetable el cuadernillo que ha encargado a su equipo de corta y pega con el supuesto programa que llevaría adelante si Podemos tiene la gentileza de investirle de una vez y dejar de enredar. ¡Trescientas medidas, señora, ni una más ni una menos! Cómo convertir España en el paraíso de la izquierda terrenal. Suene la trompetería porque aquí está el Programa Común Progresista. Que lo de 'progresista' siempre es discutible porque las etiquetas son elásticas pero lo de común va a ser que no. Es el programa común de Sánchez, Calvo, Ábalos y Adriana Lastra. Iglesias ya le ha hecho la peineta y sugiere al presidente que acorte los preliminares y vaya al turrón, al tomate: qué trozo del Consejo de Ministros está dispuesto a arrendarle al partido morado. Y con qué presupuesto”.

En Onda Cero, Rubén Amón se preguntaba: “¿No os parece hermoso y hasta poético que la justicia haya unido lo que la política separó? Esperanza Aguirre y Cristina Cifuentes, tan distintas, tan distantes, compartirán el banquillo como imputadas en la trama de la Púnica.

Merecen ambas la presunción de inocencia, ¿y la presunción de ignorancia? La existencia de una caja B a sus espaldas es verosímil, pero su posición jerárquica en el partido conlleva una evidente responsabilidad, aunque sea in vigilando.

Y no in-vigilando, sino especulando. ¿Le conviene a Sánchez entonces forzar las elecciones, para retratar al PP en el fango de la corrupción?

El líder socialista va a anunciar hoy 300 medidas progresistas. ¿No sería mejor tres o cuatro conservadoras?

Por cierto, profesor, ¿sabía usted que Amazon va a repercutir en sus clientes, usted señora, la Tasa Google que va a aplicar Sánchez?

Rivera reapareció ayer en este espacio radiofónico y aprovechó la entrevista para distanciarse de una coalición con el PP, ya sabéis, España Suma. ¿Pero no es verdad que la única España que suma es la de los 123 diputados del PSOE y los 57 de Ciudadanos? Haced la cuenta conmigo: 180, mayoría absoluta.

Torra será juzgado el 25 de septiembre por desobediencia. ¿Terminará siendo el lazo amarillo la soga de su carrera política? Qué hermosa alegoría”.

En Onda Cero, Fernando Ónega afirmaba: “Hablamos en hipótesis, supongo. Primero habrá que saber si hay campaña electoral. Si la hay, las imputaciones comunicadas ayer, bien no le vienen al PP. Ya puede ponerse Pablo Casado a predicar que Aguirre, Cifuentes, la Gürtel y la Púnica son el pasado y que él es la regeneración, que la palabra corrupción estará en la campaña con tintes de actualidad.

Sobre todo, si los imputados están prestando declaración por esas fechas. Primer daño que se puede constatar: con esta noticia, ya se cae esa ilusión agosteña del España Suma. La empezó a enterrar ayer en este programa el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, al proclamar que España suma, pero la corrupción resta. "Una es cosa es", añadió, "compartir un programa y otra ir en las mismas listas".

Quizá Rivera no necesitaba esta noticia, singularmente en lo que afecta a Esperanza Aguirre para justificar su no. Quien aspira a sobrepasar a Pablo Casado en el liderazgo de la derecha no puede engrandecerlo con una coalición electoral que beneficiaría al más grande. Pero el auto del juez, los indicios de presuntos delitos que atribuye a la lideresa, el contenido general de su escrito y la descripción de cómo se desviaban fondos públicos al partido conservador le vienen a Rivera como anillo al dedo y al resto de los partidos para volver a asociar la corrupción al nombre del Partido Popular. Otro golpe de fortuna para Pedro Sánchez. Y otro golpe de infortunio para el PP. Quizá sea injusto, pero la política es así”.

En la SER, José María Izquierdo comentaba: “Miles de españoles confiaron durante años, a la vista de cómo se llenaban las cárceles madrileñas, en que el tren de la justicia se parara alguna vez en la estación Esperanza Aguirre. La lideresa es pieza de caza mayor en el PP. Quizá haya sido la tercera fuerza más potente, después de Aznar y Rajoy, en el partido del charrán. Ha mandado mucho, muchísimo.

Pero además, Aguirre ha sido el buque nodriza de todos los corruptos, a docenas, de la Comunidad de Madrid. Presidentes y vicepresidentes, consejeros, alcaldes, viceconsejeros y vicealcaldes. Todo lo que ha tocado la desvergonzada lideresa en su larga vida política, incluido el sórdido tamayazo, chorrea mugre y suciedad.

Dadas estas circunstancias, entenderán ustedes que el Ojo está obligado a recordarles que por las finas manos de la condesa de Bornos también pasaron, por ejemplo, Pablo Casado, Santiago Abascal, Martínez-Almeida o Isabel Díaz Ayuso, la brillante voz de la perrita Pecas. Orgullosos liberales amamantados toda la vida por abundante dinero público. Y ahí les tienen, tan telendos. Los corruptos eran otros, dicen”.

En la COPE, Jorge Bustos opinaba: “El auto, que todavía no hemos podido leer, pero por lo que se ha filtrado es bastante duro porque llega a acusar de una decena de delitos relacionados directamente con la corrupción, desde la falsedad documental, la malversación… Es medio millón de desvío de fondos públicos para las campañas de 2007 y 2011 que el PP ganó con mayoría absoluta. Esperanza Aguirre ha reaccionado diciendo que todo es falso y que se podrá defender y que está muy contenta de defenderse. Pero la verdad es que hasta ahora no habíamos oído a nadie y menos a un juez atribuir directamente y con esa seguridad haber fraguado en persona, en un despacho, con sus consejeros de confianza, un mecanismo de financiación ilegal del partido, es una acusación grave”.

Gloria Lomana señalaba: “Es un paso más que viene a decir que la justicia es lenta, como siempre hemos visto, pero que también es implacable y que va caminando”. “Esto no es más que la posibilidad de que se defiendan pero es un auto muy complejo y tendremos que ver. Pero parece que muy bien argumentado y desde luego estamos ante un juez muy serio, que tiene una trayectoria de trabajo minuciosa”. “Y de momento sigue tirando de esta pedazo de manta” y que “tiene ramificaciones empresariales notables”. “Aunque el auto hay que leerlo, define una corrupción que parece que era sistémica dentro de algunas administraciones, que define a la administración como una comisionista, de manera organizada, incluso voraz, a la hora de generar contratos”. “Esperanza Aguirre es una política formidable” y “yo le dije en alguna ocasión cómo es posible que no te enteraras que tus dos vicepresidentes eran como eran”. “Ella ha reconocido que in vigilando falló”. “Pero es imposible pensar que con una estructura como esta no se enterara”. 

Carmelo Encinas destacaba: “Ya van por 70 los imputados”. “El origen de todo esto es que usar dinero público para el partido estaba en la cultura del PP, era como un pecado venial, que estaba bien visto en el PP. Digamos que el pecado mortal era llevárselo al bolsillo personal. El caso de Aguirre es llamativo. Siempre he militado en la convicción de que Aguirre nunca se llevó un duro para su pecunio y lo sigo estando. Pero es imposible caminar por un cenagal sin que tu pituitaria capte su fetidez”. “El caso de Aguirre no es el mismo que el de Cifuentes. A Aguirre le acusan de idear, impulsar y de supervisar la financió ilegal”. “Lo que ha pasado en el PP en todo este tiempo es algo que a ellos les parecía menor”. “Y ahora cuando el juez García Castellón tira de este hilo, es que es inacabable, tiene mucha cuerda”.

En la SER, Angels Barceló decía: "Ciudadanos sigue conviviendo con la corrupción sin ningún pudor. El apoyo del partido de Albert Rivera al Partido Popular de la corrupción tiene su máximo exponente en Madrid. En esta comunidad todos los presidentes autonómicos desde 2003 a 20018 han sido imputados por corrupción, con ellos un buen puñado de altos cargos, muchos de ellos consejeros. En este Partido Popular es donde nació, creció y se hizo la nueva presidenta Isabel Díaz Ayuso, quien dice no conocer de nada ni a Cifuentes ni a Aguirre, pero con la que colaboró de manera cercana.

En las propias listas que llevó Ayuso a las elecciones se coló algún imputado. En las charca de las ranas, en la que parece que también chapoteaba Aguirre, no estaba ayuso pero las conocía bien a todas. Pues bien, a pesar de todo esto, Ciudadanos, el partido de la regeneración, no lo olvidemos, gobierna con este Partido Popular y cuando se le pregunta, no le tiembla la voz , "que le pregunten al PP", ese partido con el que gobierna.

Más lejos llega el líder Albert Rivera, que ayer al ser preguntado por una reedición de Navarra Suma en el resto de España, una coalición con el PP para unas posibles elecciones, dice que España Suma pero que la corrupción resta. En Madrid parece que no resta. Ni en esas comunidades en las que Ciudadanos ha permitido la perpetuación de los gobiernos del PP tras décadas de gobierno. No lo digo yo, lo dice quien fue uno de los dirigentes de Ciudadanos que abandonó, precisamente, por esa deriva, el partido tiene un problema".