(Oído en radio, visto en TV) Mikel Jiménez (COPE): “Sánchez tiene alma de vedette. Yo no he visto un ego tan grande y con tan poca empatía hacia los demás”

En la COPE, Mikel Jiménez apuntaba: “El mal cansa mucho”. “Este Gobierno se fundamenta en dos patas, básicamente: la mentira sistemática, sin rubor”, “y luego esta especie de ‘yo no he sido, señorita’, que a mí me da mucha rabia. Cuando pasa algo malo la culpa siempre es de los demás”. “Sánchez tiene alma de vedette. Yo no he visto un ego tan grande y mira que en política en España egos los ha habido desproporcionados, pero jamás he visto una persona con tan poca empatía hacia los demás. Porque Iglesias es Iglesias y el comunismo ya sabemos cómo funciona, es una dictadura y una manera totalitaria de pensar, pero Sánchez que se supone que venía de la socialdemocracia, etc., tiene tal fatuidad dentro de él, le gusta tanto escucharse cuando habla, que no se da besos porque no llega. Con un Gobierno que tiene al frente a un individuo de semejante catadura, francamente es que me da mucha pereza escucharlo porque ya sé lo que me va a decir”. “Con este señor va a venir ruina”.

En la COPE, Ana Martín decía: “En este primer año de legislatura hemos visto tres de las cuatro fases que va a tener esta legislatura. La primera duró muy poco, es antes de la pandemia, que eran gastos y gestos, una continuación de los famosos viernes sociales que hubo en campaña. Luego tenemos durante la pandemia basado en la propaganda, el oscurantismo, con errores muy gruesos aún sin auditar. Luego tenemos este final de pandemia donde se empieza a vacunar con la recuperación de la agenda ideológica por parte de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias que tuvieron que aparcar durante los meses más duros de la pandemia, con la ley de eutanasia, de memoria democrática, con la famosa ley del solo sí es sí. Y la única etapa que nos queda por ver de esta legislatura es la pospandemia, en la que Sanchez se dedicará a vivir de las rentas de la UE, nunca mejor dicho, a cultivar su persona y a preparar el camino para su reelección, que pasa por mantener a Podemos a raya, y a Vox alto y el centroderecha dividido”. 

Jorge Bustos destacaba: “Es un pacto de legislatura y de investidura y de moción de censura”. “Sánchez debe su poder al separatismo, esto es una obviedad, a los tipos que dieron el golpe de Estado y semanas después se alió con ellos para echar al PP y después la investidura, los presupuestos, todo se lo debe a los separatistas y por tanto necesita calmar su necesidad de ser excarcelados con promesas que en algún momento    se van a tener que materializar, bien a través de la reforma del delito de sedición -una reforma ad hoc para sacarlos de la cárcel- o bien a través de unos indultos humillantes para el poder judicial, incluso para el rey, que tiene que firmarlos. Eso también va a tener un coste. Pero como lo que le importa a Sánchez es el día a día en Moncloa, tachar un día más de aguante en el poder, y ahora el tripartito en Cataluña intentar que salga adelante, pues necesita mantener la expectativa abierta sin llegar a hacerla -ahora Iceta va diciendo lo de los indultos y por otro lado dice que jamás pactará con ERC, cosa que nadie se cree-. Tienen que estar manteniendo todas las barajas”. “Es la doblez clásica del socialismo catalán”. 

En RNE, la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, decía: "No hay plan B. O hay un acuerdo entre Reino Unido y España o Gibraltar se convierte en la frontera externa de la UE". "Tenemos que buscar un acomodo a la situación de Gibraltar. Las pretensiones irrenunciables en materia de soberanía no pueden ser un obstáculo. Llevamos así 300 años".

Ha reconocido que España y Reino Unido tienen "pretensiones irrenunciables" sobre la soberanía de Gibraltar pero ha pedido dejar de lado las "excusas" y "resolver las cuestiones prácticas" de los ciudadanos. "Así llevamos 300 años".

ha recordado que la soberanía, "en el siglo XXI", tiene mucho que ver con "la fiscalidad y la capacidad de cooperar a nivel policial y aduanero". "Es una cuestión más compleja, más amplia y funcional".

A menos de tres días de que expire el plazo para alcanzar un acuerdo con el Reino Unido, la titular de Exteriores ha asegurado que el principal "escollo es buscar el encaje de la fluidez en la frontera", aunque no ha querido "entrar en detalles" por respeto a la negociación. "Cuando uno sale a contarlo a la plaza pública, significa que abandona la negociación".

González Laya ha explicado que existen una "serie de respuestas técnicas para arbitrar la movilidad que se han explorado y se han puesto sobre la mesa", pero que se encuentran a la espera de que haya una "decisión política".

La intención del Ejecutivo español es conseguir una alternativa a una "frontera dura", la que se encontrarían los trabajadores transfronterizos en el caso de no alcanzar un acuerdo antes de la llegada de 2021. "Por eso estamos poniendo el empeño en la negociación, y yo tuve ocasión de desplazarme al Campo de Gibraltar a hablar con alcaldes y empresarios".

En la COPE, Carmen Martínez Castro decía que lo de los indultos “tiene una clave electoral. El Gobierno está jugando con dos barajas. No va a aprobar los indultos porque al PSC no le interesa ir a las elecciones con los líderes del procés en la calle. Pero al Gobierno le interesa mantener ese debate y esa esperanza abierta porque considera que le da votos de cara a las elecciones catalanas”. “No sé lo que va a hacer. Pero sí veo que esta polémica -que la ha sacado el PSOE queriendo sacarla-  y que el PSOE la mantiene viva sabiendo que le cuesta muchos votos y muchas criticas en el resto de España lo hace con una intención muy clara que es sacar un rendimiento electoral en Cataluña”. 

En la COPE, el economista José María Gay de Liébana decía: “Tenemos una espina clavada, que es la de la productividad. En gran parte, el bajo desarrollo de nuestra economía responde al escaso crecimiento de nuestra productividad, donde la estructura económica juega un papel determinante, con un excesivo componente de servicios, a menudo de bajo valor añadido, y con un tejido empresarial muy concentrado en empresas pequeñas. En los últimos 20 años, Pilar, nuestra tasa anual promedio de crecimiento de la productividad de los factores ha sido del 0,2%, muy por debajo de economías robustas como, por ejemplo, EE.UU. y Alemania. En ese hándicap de nuestra productividad incide el capital humano, cuya calidad es baza primordial. La mejora del capital humano es imprescindible para vigorizar la productividad. Los promedios de los niveles educativos de trabajadores y empresarios españoles son inferiores a los del resto de la Unión Europea. Además, sufrimos los estigmas de elevadas tasas de abandono y fracaso escolar, y una brecha negativa en los indicadores de calidad educativa. El mundo actual, la globalización, el progreso tecnológico, la automatización de tareas, no solo requiere de una sólida formación sino de unas habilidades específicas. Hay que rediseñar nuestro sistema educativo. Y eso exige no hacer de España Tarugolandia, es decir, un país de tarugos donde el nene y la nena, que son muy majos, pasen de curso en la ESO y el Bachillerato, aunque suspendan, sin demostrar una mínima suficiencia de conocimientos, expresándose sin ton ni son y así, paso a paso, lleguen a la universidad. En pocos años tendremos un capital humano penoso, con tarugos. Por tarugo, que conste, el diccionario de la RAE entiende coloquialmente a persona de rudo entendimiento…”.