No, por el momento, Telefónica asegura que no presentará una OPA sobre Portugal Telecom, como espera el mercado. En bolsa, Portugal Telecom sube y Telefónica baja.
Telefónica ganó la Junta de Accionistas de Portugal Telecom, con un 74 frente al 26%. Es decir, que los accionistas estaban con su oferta, elevada en la noche de vísperas, donde ofrecían hasta 7.150 millones de euros por el 30% de PT en la brasileña VIVO, lo que le permitiría controlar la operadora del país sudamericano.
Ganó pero perdió, porque el Gobierno portugués del socialista José Sócrates, impuso el veto político, la golden Share, una acción de oro que supone que el Gobierno considera a la operadora una compañía estratégica para la economía portuguesa y que, por tanto, no permite, no sólo que alguien la compre, que no es el caso, sino que Telefónica le compre la participada VIVO.
Bruselas obligó a España a suprimir la acción de oro y así muchas empresas españolas estratégicas pasaron a manos de extranjeras. El caso más llamativo, que no único, la primera eléctrica del país, Endesa. Lo más jocoso de todo este proceso fue cuando los norteamericanos quisieron quedarse con la francesa Danone. El Gobierno francés, sin despeinarse, aseguro que el fabricante de yogures era empresa estratégica para Francia. Y es que el Danone forma parte de la idiosincrasia gala, si ustedes me entienden.
El escándalo, pues, está servido. La vicepresidenta de la Comisión Europea, Neelie Kroes, ya ha comentado que no le gusta nada la acción de oro portuguesa y es posible que dentro de unos días los tribunales comunitarios podrían obligar al Gobierno de José Sócrates a derogarla.
La verdad es que otros países son mucho más prácticos: nada de acción de oro, sus empresas estratégicas son estatales. Hablo de Francia e Italia, principalmente.
Tras el escándalo de Lisboa, en la misma mañana del lunes, la bolsa aplaudió a Portugal Telecom y castigó a Telefónica. ¿Cómo puede ser? Sencillo: en primer lugar nadie confía en que el veto político se mantenga durante mucho tiempo. En segundo lugar, todo el mundo piensa que la respuesta de Telefónica será la de lanzar una OPA, ahora no sobre VIVO, sino sobre la propia Portugal Telecom. Por supuesto, los directivos de César Alierta lo niegan.
Por lo demás, el caso VIVO deja claro que la diplomacia económica del Gobierno Zapatero está donde siempre: en la línea de salida.
Y lo peor de todo: ¿no será todo esto una venganza por la eliminación de Portugal del Mundial?
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com