Llevar la boina calada tiene estos costes. Valencia acaba de reformar la Ley del Consell Juridic Consultiu de la Generalitat Valenciana. Además de modificar la composición y el nombramiento de los miembros del consejo, se aprovecha el cambio para valencianizar el Consejo, según reza en el preámbulo, que sin embargo, no añade que se aprovecha también para avanzar en la equiparación de sexos.
Por ejemplo, donde decía president o presidente ahora dirá -tanto en su versión castellana como en la valenciana President o presidenta. Como ven, muy trascendental. Otro de los cambios importantes es que en aquellos documentos donde se habla de Generalitat Valenciana ahora se dirá la Generalitat, a secas, como en Cataluña, que es lo que está de fondo. Por lo mismo, cuando se decía Las Cortes Valencianas, ahora se dirá Les Corts y cuando se hablaba de Gobierno valenciano, ahora se dirá Govern Valencià o Consell. Insistimos, tanto en la versión castellana como en la valenciana.
En fin, una chorrada que además de consumir recursos, dirige a Valencia a un peligrosa catalanización. Por lo demás, el presidente del Consejo será nombrado por el presidente de La Generalitat (ya lo decimos bien) entre los miembros del consejo. Por su parte, los miembros deberán de ser consejeros de reconocido prestigio y los letrados nombrados por oposición.
