William White (OCDE), hoy: "Es sorprendente que tan pocos banqueros hayan ido a prisión"
En una carta que publica el 'New York Times', afirma: "Me pone enfermo cómo la gente habla cruelmente de timar a sus clientes. Durante los últimos 12 meses he visto a cinco directores referirse a sus propios clientes como 'marionetas', algunas veces en correos internos".
Y prosigue: "No tengo constancia de ningún comportamiento ilegal. ¿Pero se llevan las cosas al límite y se colocan productos complicados y muy lucrativos a clientes incluso si no son las inversiones más sencillas o las más adecuadas para ellos? Absolutamente. Cada día, de hecho". "Actualmente, la pregunta más común que recibo de mis analistas 'junior' sobre derivados es: ¿Cuánto dinero podemos sacarle a este cliente?". "El liderazgo tenía que ver con tener ideas, ser un ejemplo y hacer lo correcto. Ahora, si haces suficiente dinero para la firma, serás promocionado a una posición de influencia", continúa el alto ejecutivo que trabajó durante 12 años en la entidad.
Es más, detalla las tres cosas que se deben hacer para ascender en el banco: convencer a los clientes para que inviertan en acciones o productos de los que el banco está intentando deshacerse porque no se ve en ellos un potencial beneficio; conseguir que tus clientes compren cualquier producto que traiga beneficio a Goldman, aunque no sea lo adecuado para ellos; y sentarte en una silla, en la que tu trabajo sea operar con cualquier producto nombrado con un acrónimo de tres letras opaco y que no tenga liquidez.
Todo esto recuerda y mucho a la película 'Margin Call', en la que se denuncian precisamente las mismas prácticas. O este documental, 'Inside Job', que habla exactamente de lo mismo.
Hoy mismo, en Expansión, el presidente de Economía y Desarrollo de la OCDE, William White, realizaba estas declaraciones: "Es sorprendente que tan pocos banqueros hayan ido a prisión".
White dice eso tras la crisis económica derivada de la especulación financiera. Y el ex directivo de Goldman nos confirma que la avaricia no tiene límites.
Pues bien: debería haber responsabilidades penales para aquellos banqueros y ejecutivos que se han dedicado a timar a sus clientes; y que luego se han ido de rositas e incluso cobrando indemnizaciones millonarias.
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com
Un alto ejecutivo de Goldman Sachs -gigante estadounidense de la banca de inversión, o sea, de especulación- ha denunciado que la entidad trataba de sacar el máximo dinero posible a sus clientes, sin ilegalidades pero "timándoles".
En una carta que publica el 'New York Times', afirma: "Me pone enfermo cómo la gente habla cruelmente de timar a sus clientes. Durante los últimos 12 meses he visto a cinco directores referirse a sus propios clientes como 'marionetas', algunas veces en correos internos".
Y prosigue: "No tengo constancia de ningún comportamiento ilegal. ¿Pero se llevan las cosas al límite y se colocan productos complicados y muy lucrativos a clientes incluso si no son las inversiones más sencillas o las más adecuadas para ellos? Absolutamente. Cada día, de hecho". "Actualmente, la pregunta más común que recibo de mis analistas 'junior' sobre derivados es: ¿Cuánto dinero podemos sacarle a este cliente?". "El liderazgo tenía que ver con tener ideas, ser un ejemplo y hacer lo correcto. Ahora, si haces suficiente dinero para la firma, serás promocionado a una posición de influencia", continúa el alto ejecutivo que trabajó durante 12 años en la entidad.
Es más, detalla las tres cosas que se deben hacer para ascender en el banco: convencer a los clientes para que inviertan en acciones o productos de los que el banco está intentando deshacerse porque no se ve en ellos un potencial beneficio; conseguir que tus clientes compren cualquier producto que traiga beneficio a Goldman, aunque no sea lo adecuado para ellos; y sentarte en una silla, en la que tu trabajo sea operar con cualquier producto nombrado con un acrónimo de tres letras opaco y que no tenga liquidez.
Todo esto recuerda y mucho a la película 'Margin Call', en la que se denuncian precisamente las mismas prácticas. O este documental, 'Inside Job', que habla exactamente de lo mismo.
Hoy mismo, en Expansión, el presidente de Economía y Desarrollo de la OCDE, William White, realizaba estas declaraciones: "Es sorprendente que tan pocos banqueros hayan ido a prisión".
White dice eso tras la crisis económica derivada de la especulación financiera. Y el ex directivo de Goldman nos confirma que la avaricia no tiene límites.
Pues bien: debería haber responsabilidades penales para aquellos banqueros y ejecutivos que se han dedicado a timar a sus clientes; y que luego se han ido de rositas e incluso cobrando indemnizaciones millonarias.
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com