Puede tomar la iniciativa en dicha reconversión pero, si renuncia a cualquier fusión, el Gobierno no le defenderá si llegara una OPA del exterior.
El presidente de Iberdrola se empeña en que su empresa vale 95.000 millones de euros. Ya no existe el miedo a EDF, pero persiste el miedo a una OPA de E.ON. Y Florentino estaría feliz con ello. Por su parte,El ministro de Industria, Miguel Sebastián, se ha cansado de esperar y le ha lanzado un ultimátum al presidente de Iberdrola, Ignacio S. Galán: o se apunta a la reconversión energética, a las fusiones por las que España pretende contar con grandes operadores en Europa, o que no espere defensa del Gobierno cuando llegue la OPA.
El Gobierno ha intentado que, una vez más, sean los operadores quienes convenzan a Galán. En concreto, que sean Antonio Brufau, presidente de Repsol, e Isidro Fainé, máximo responsable de La Caixa, quienes intenten convencer al presidente de la primera eléctrica española de una fusión entre Gas Natural e IB o de un acuerdo con Repsol y un matrimonio GN-Fenosa.
Pero Fainé y Brufau ya han dicho que ahora es Galán quien debe mover pieza. Y Sebastián ha obrado en consecuencia: ha advertido a Galán que si sigue negando todas las opciones, el Ejecutivo no le protegerá si llega una OPA de Europa contra Iberdrola. No se teme a la francesa EDF, sino a la alemana E.ON, cuya capitalización se eleva a 83.000 millones frente a los 41.500 de Iberdrola: justo el doble.
Pero Galán insiste: si alguien quiere comprar Iberdrola que ponga sobre la mesa 95.000 millones. La verdad es que esa cifra sólo se obtiene sumando la deuda a la capitalización y añadiendo una prima de cerca del 50%. Iberdrola es muy rentable, ciertamente, pero el cálculo parece heterodoxo. En definitiva, todo el mundo cree que con mucho menos se puede lanza una OPA sobre el 100 por 100 de Iberdrola.
Y no olvidemos que habría alguien feliz de colaborar -se ha ofrecido reiteradamente- en ello: Florentino Pérez, presidente de ACS. Sería la mejor manera de ir a una fusión Entre Fenosa y Gas Natural a la que sumar su 13% de Iberdrola, valorado en activos.
No olvidemos, tampoco, que E.ON acaba de cerrar, por fin, su acuerdo con Endesa, y se ha convertido en la cuarta eléctrica de España.
En cualquier caso, ahora es el salmantino Galán quien debe tomar la iniciativa. Y se respetará su opción. Lo que no se respetará es que no tome ninguna.