Un sistema funcionarial estable recorta las tasas de corrupción
En Transparencia Internacional lo tienen claro. La corrupción es la causa principal de la pobreza. ¿Cómo acotar la corrupción? Jesús Sánchez Lambás, miembro del Comité Ejecutivo de Transparencia internacional, considera que una función pública estable recorta las tasas de corrupción. "Cuando el político se sabe interino y se encuentra sometido a los controles de unos funcionarios estabilizados, la corrupción es más difícil; cuando no es así, como en República dominicana, se llevan hasta las cortinas, y ni es una alegoría", señala Sánchez Lambás en los Coloquios Fax Press.
Por supuesto, poder contar con una policía y una judicatura independiente minimiza el riesgo. Por el contrario, un sistema en el que tras cada cambio de Gobierno se produce una avalancha de hambrientos dispuestos a llenar el buche en ese período de tiempo, es una fuente clara de corrupción. Más: según Sánchez Lambás, los países con sistemas fiscales desarrollados son menos corruptos que aquellos países que viven de sus recursos naturales, como Venezuela o Arabia Saudí, donde el político actúa como dueño y señor.
Así que aquí están descritos los principales focos de corrupción -y pobreza- de la América hispana: un sistema fiscal no extendido, un funcionariado cambiante y un exceso de dependencia presupuestaria de los recursos económicos.