A través de su periódico quisiera mostrar mi preocupación ante las nuevas medidas que el gobierno del talante, que no del talento, pretende imponer.
Con la bandera de la no discriminación, contra la que todo el mundo estaría de acuerdo, creo que lo que se pretende es darle una vuelta más al pensamiento único, quien no piensa, o no está de acuerdo con lo que se establece como bueno desde el poder, no tiene cabida, será perseguido, sancionado, etc.
Yo me pregunto ¿donde está la libertad de opinión, de pensamiento, de expresión?, ¿donde la libertad de los padres para educar a sus hijos según sus valores y creencias?
¿Dónde dice, en nuestra constitución, que el estado sea algo más que el garante de nuestras libertades?
Creo que el gobierno del talante, que no del talento, le está tomando apego a las medidas que solo buscan organizar nuestras vidas a su manera, nos gusten o no. Y ya está bien.
Ángela Díaz