Moralidad Valenciano o una razón para hacerse del 15-M

Una concejal socialista de una muy noble villa manchega dedica un vídeo porno al portero del equipo de fútbol del pueblo, que no, no era su esposo. Entonces, la número dos de Rubalcaba, la nobilísima Elena Valenciano (en la imagen) -no confundir con la nobilísima Alteza Serenísima, que esa sólo es Corinna- le anima a que no renuncie.

-¿Vas a dimitir por eso

La tal concejala ha aprovechado su bien ganada fama nacional para salir a convertirse en estrella de la tele más mugrienta, como corresponde a la noticia que le llevó al estrellato. La pornografía y el adulterio no son un motivo para dimitir. Los políticos han dejado de ser una referencia moral. Más bien, la función pública es una referencia inmoral.

Ahora viene otro caso en otro pueblo ubicado un poco más al norte de España, por León, también conocido como Cazurrandia. Se lo hago corto, que no soy Jorge Javier Vázquez: un alcalde del Partido Popular se lía con una concejal de mismo partido. Luego la concejal se cansa y el otro la acosa. Vamos, que quiere continuar con el lío. La cosa acaba en los tribunales y el susodicho condenado por acoso.

Y ahora resulta que el PSOE consigue la alcaldía del pueblo en coalición con el acosador. El innegable Óscar López, portavoz del PSOE de la factoría Rubalcaba, y máximo jefe en Castilla-León, da marcha atrás. El nuevo alcalde, su correligionario, asegura que a él le gusta el puesto y se larga del partido para no verse sometido a disciplina.

Míster López se autoinculpa (muy importante esto de la autoinculpación en la cosa progre. Arrepentirse jamás, pero autocrítica, toda la del mundo) y asegura que "le cegó la posibilidad de expulsar a un "acosador de la política". O sea, lo hizo por un fin ético. Aunque no he acabado de entenderlo porque al apoyar la moción estaba apoyando al acosador, pero dejémoslo.

Total, que gracias a Valenciano, que no quería saber nada con un acosador, el PSOE renunció a la alcaldía de tan soberana ciudad norteña.

Para entendernos, resulta que intentar mantener un ligue con una mujer con la que ya has ligado es una cosa gravísima, nada menos que acoso. 'Sinencambio', serle infiel al esposo con el portero de fútbol -amor al deporte, que le dicen-, con porno incluido, eso es liberación femenina. Es lo que se llama moralidad Valenciano y sinceridad Óscar López.

Y esta es la clase política que sí, que provoca feroces tentaciones de pasarse al 15-M.

Eulogio López