Está muy bien esto de que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro (en la imagen junto a Ana Mato), reciba a las asociaciones familiares -las de la familia natural o normal, no las de las familias raritas- para explicarles la reforma fiscal. Pero mejor sería que en esa reforma fiscal no aumentara -mínimamente, por otra parte- las desgravaciones por hijo y se dedicara a subvencionar a la familia y a la maternidad... tal y como se hace en los países de nuestro entorno. Por contra, el rata de Montoro solo promete los 100 euros, para familias numerosas donde la madre no tiene ingresos. Es decir, cuanto más lo necesitan las parejas jóvenes. Lo empezarán a recibir a partir del tercero.

En España, sólo las madres trabajadoras -¿No lo necesitan más las madres sin trabajo- reciben la cicatería de 100 euros mensuales por niño, cuando en Europa las ayudas la familia y a la maternidad triplican y sextuplican esas cantidades.

En la rueda de prensa en la que se presentó de manera oficial la reforma fiscal, sólo un medio preguntó por las rácanas ayudas a la familia: Hispanidad. La presión feminista y antinatalista es de tal calibre que a los medios -los gubernamentales y los antigubernamentales- no les interesa las ayudas maternidad. Lo suyo, al parecer, es que España desaparezca por consunción y que la población española envejezca con celeridad. Las feministas odian la maternidad, siguiendo el emblema de un amigo mío muy progre peor dotado de sentido común: las estériles -por devoción o por obligación- odian a las madres.

La mayor aportación de la mujer al bien común es la maternidad

Montoro, para desgravar hay que ingresar. Al que no ingresa de nada les sirven las desgravaciones. Además, la mujer que tiene hijos le está proporcionando a usted el activo más precioso para el Estado: futuros contribuyentes. La mayor aportación de la mujer al bien común es la maternidad. Por eso, el salario maternal no es una limosna, es una cuestión de justicia. ¿Se entera

Y respecto a la ministra de Sanidad, Ana Mato, caramba, debería ser un poco más sensible hacia la situación de la mujer más perseguida y maltratada hoy en día en España: la madre.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com