Pasó la fecha límite del 30 de junio y Mediapro continúa sin pagar a los clubes de fútbol para la temporada 2010 y 2011. Terminó el Mundial y la productora de Jaume Roures y Tatxo Benet, accionistas de referencia, junto a José Miguel Contreras, de La Sexta, propietario de Público y grupo mediático al servicio de La Moncloa, continúa sin pagar a los clubes de fútbol que han detenido su marea de fichajes.
Les adeuda, al conjunto de los clubes, 250 millones de euros, lo que representa aproximadamente el 50% de los derechos de la Liga de Fútbol Profesional.
Ojo, con la LFP se negocia en bloque, pero con el Barça y el Real Madrid los conciertos son bilaterales. Pues bien, el multimedia zapatista adeuda al Barça 147 millones de euros y 143 al Real Madrid. Y no paga.
Además, el nuevo presidente del Barça, Sandro Rosell, mantiene pésimas relaciones con todo el entramado creado por Laporta, Roures, Cruyff y compañía. Y Rosell y Florentino Pérez se entienden a las mil maravillas.
Y es que el concurso de acreedores de Mediaproducciones S.L. ha situado a todo el grupo Mediapro, y de propina La Sexta -otro saco de pérdidas- al borde del abismo. No, no es una filial menuda, como ya hemos explicado en Hispanidad, es la clave de todo el negocio.
Pues bien, la idea de Roures para superar la tormenta consiste, atención, en acentuar la monclovización del grupo, es decir, acentuar el carácter comunista y anticlerical, especialmente este segundo, del multimedia. Considera Roures que es clave que Zapatero cuenta con un grupo de estas posiciones tras haber semi perdido el apoyo sindical y enfrentarse con unas encuestas a la baja a las elecciones regionales de 2011 y a las generales de 2012.
Bueno, a esa estrategia tan ideológica se une la estrategia Cebrián, es decir, no pagar a los bancos. La deuda de Mediapro, que se cifra en 2.400 millones de euros es proporcionalmente superior a la de PRISA, al poseer menos activos que vender, pero también tiene sus ventajas: puede extorsionar a los bancos, igual que PRISA y además, dos de sus prestamistas son el Instituto Catalán de Finanzas y el Instituto de Crédito Oficial. Es decir, ambos controlados por el PSOE que seguramente será bonancible con don Jaume Roures.
Y es que una cosa es el Mundial y otra la Liga de Fútbol, ésta, mucho más negocio que aquella para ganar y para perder.
Hay otra solución: que Silvio Berlusconi compre los derechos de Mediapro, pero ya se sabe que Berlusconi siempre compra a precio de saldo. La ventaja de son Silvio es que la ideología le importa un bledo que para eso es el primer ministro de Italia, no de España y para eso carece de principios.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com