Podría ser que los republicanos McCain y Mike Huckabee acaben formando ticket presidencial.

Al primero le ha tocado el papel de héroe de guerra y al segundo el de pastor protestante, por lo que sus diferencias son importantes, por ejemplo cuando hablamos de defensa de la vida del no nacido.

Ahora bien, hay algo en que lo que ambos coinciden, y que hoy en día parece material escaso tanto en la izquierda como en la derecha: les gusta lo pequeño.

No es broma, tanto el militar como el pastor tienen esa chestertoniana sensación de que la economía y la organización social no es más que peces grandes intentando devorar, la sensación de que el duelo entre capitalismo y socialismo es una máscara del verdadero duelo entre los pocos grandes y los muchos pequeños. 

Las grandes corporaciones y patronales norteamericanas ya han caído en la cuenta, y se están volviendo hacia el bando demócrata, convertido al capitalismo. No les gusta McCain y tampoco les gusta Huckabee, porque ambos tienen claro que lo pequeño es hermoso, justo y libre, y que, a Chesterton me remito: ¿Qué más me da que todas las tierras de la zona sean propiedad del Condado o sean propiedad del Duque de Wellington?

No nos engañemos, en todo Occidente tanto el centro-izquierda como el centro derecha se han vuelto hacia las grandes empresas, es decir, hacia la plutocracia. Durante todo el siglo XX, para mantener un espejismo de pluralismo ideológico, el debate se ha mantenido entre plutócratas estatistas y plutócratas capitalistas. Pero todos ellos eran plutócratas. No hay pluralismo, son las dos caras de una misma moneda. McCain, probablemente por su edad y sus vivencias, y Huckabee, por su fe, han hurgado en esa herida y las multinacionales norteamericanos, y Wall Street con ellos, han corrido a apoyar a Hillary Rhodam y a Barak Obama. Que, además, como todo el mundo sabe, son muy progresistas. De los que gritan: "Aborto libre y gratuito", y ahora que ya somos progres, tenemos el campo libre para enriquecernos y para presidir todas las empresas, Ministerios o institución que sea presidible.

Sí, me gusta este detalle de McCain y Huckabee. Lo cual no quiere decir más de lo que digo. Porque existen otros principios no-negociables por lo que McCain no pasa el examen correspondiente. Sin ir más lejos: el aborto.

Eulogio López  

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