La deuda de los equipos de fútbol con Hacienda ha disminuido un 8,2% pero sigue manteniéndose en niveles intolerables. De los 752,3 millones que debían a principios de 2012, la cifra ha bajado a 609,4 millones de euros, según fuentes ministeriales. Esta cantidad es superior en nueve millones al recorte que se acometió en I D I para el año 2012, y corresponde en su mayor parte, 535,8 millones de euros, a los clubes de primera división. Los de segunda y los de otras categorías adeudan sólo 154,6 millones de euros.
El asunto es de tal gravedad que la Comisión Europea ha abierto una investigación a España y ha dado un toque de atención a nuestro país por las ayudas que podrían vulnerar la libre competencia, así como por el supuesto trato de favor fiscal que dispensa a los equipos de fútbol.
El problema no es de fácil solución. Independientemente de si existen o no privilegios fiscales para el fútbol, hay que decir que a la Agencia Tributaria le resulta complicado hacerles pagar. Como señalaba a Hispanidad Eduardo Cardona, abogado fiscalista con amplia experiencia en el mundo del fútbol, y socio director del departamento de Derecho Tributario de CSC Abogados: "En la mayoría de los casos, ni siquiera el estadio donde juega es suyo, sino de propiedad municipal. Cuando el acreedor se plantea un aplazamiento de la deuda o un fraccionamiento se encuentra ante el problema de que no hay nada realmente. Lo único que se podría embargar "son los derechos de traspaso de los jugadores, ya que éstos no son embargables".
Sara Olivosara@hispanidad.com
