Según un artículo que he leído en Forumlibertas, Patrik Carroll MA, director del 'Pension and Population Research Institute', de Londres, ha elaborado un estudio comparando los datos estadísticos sobre los abortos realizados en mujeres residentes en Irlanda desde los años 1968 al 2010, con los datos correspondientes de Gran Bretaña que analiza las consecuencias para la salud de las mujeres.
Carroll considera que la ley restrictiva sobre el aborto ha permitido que la tasa de natalidad en Irlanda siga siendo mucho más elevada que el promedio europeo, por lo que Irlanda se beneficia de un perfil demográfico más joven y con menos dependencia de la inmigración de otros países europeos. Y, no solo esto, sino que las mujeres irlandesas están más sanas que las inglesas, porque casi no abortan. Tienen una baja tasa de cáncer de mama, mejor salud mental, menos muertes fetales, menos prematuros y menos mortalidad materna.
Mientras, que en nuestro país en el año 2010 la cifra de abortos ha alcanzado 113.021. Estos datos nos deberían llevar a la reflexión de que además de atentar sobre la vida de seres inocentes no tenemos en cuenta la salud integral de la mujer que incluso en algunos casos, las hay que desesperadas, se han suicidado.
Alguien dijo: "es mejor llevar un hijo en los brazos que sobre la conciencia".
Pilar Mariscal