La realidad de la crisis señala datos menos halagüeños. Lo malo (o lo bueno) es que es difícil establecer un porcentaje exacto.
La economía sumergida sigue siendo un tema del que se puede decir mucho. El Círculo de Empresarios lo ha hecho en su publicación Implicaciones de la economía sumergida en España.
Cifran en entre un 20 y un 25% del PIB lo que significa la economía informal. Éste es un dato que siempre se ha ido manejando entre los especialistas, pero resulta interesante conocer la relación que establecen entre este tipo de economía y la tasa del paro. Ya es sabido que el crecimiento del paro, debido generalmente a una crisis económica, genera un auge de la economía sumergida. Esto se debe, principalmente, a la pérdida de ingresos o directamente del empleo, lo que aboca a las personas a compensarlo con su entrada en la economía sumergida.
Este es un problema que no sólo implica al trabajo sin contrato, sino a la falsificación de ciertos contratos. Es conocido el caso de los falsos autónomos, que se dan en el ambiente de la comunicación, en la que trabajadores trabajan para una empresa, pero se inscriben como autónomos, de manera que ellos cargan con las tasas impositivas de la Seguridad Social, pero no son realmente trabajadores por cuenta propia.
Pero como bien se dice en la publicación, es difícil estimar con exactitud los datos de esa economía, y si en 1995 se estimaban en un 22%, por un paulatino descenso hasta el 2007, lo cierto es que actualmente podrían llegar hasta el 25%, tal y como ellos estiman, o bien podrían superarlo y seguir creciendo mientras la actual situación económica del país sigue por los derroteros actuales.
Una de las posibles soluciones que se señalan en uno de los trabajos es el aumento de las multas por infracciones legales en transacciones que favorecen este tipo de economía, pero lo negativo es que quien se verá más afectado será seguramente quien ha debido acogerse a este tipo de economía informal para poder salir de una situación de desempleo o de cierta injusticia.
Juan María Piñero
juanmaria@hispanidad.com
