Las nevadas de diciembre impidieron la actividad a las aerolíneas en el aeropuerto de Heathrow, con las consiguientes reclamaciones de los pasajeros. A su vez, éstas exigieron a BAA compensaciones por no haber podido operar y algunas, como Virgin, anunciaron que no pagarían. Las reclamaciones suman unos 180 millones de euros, equivalentes al 3% de la capitalización de Ferrovial, a quien le siguen creciendo los enanos en el aeropuerto de Londres.
Sin embargo, la constructora se considera amparada por el Plan de respuesta ante la nieve aprobado por el regulador del tráfico aéreo británico (Nats) y por las propias aerolíneas. El plan prevé el cierre del aeropuerto cuando las nevadas superaran los 6 centímetros de espesor. Con respecto a las amenazas de Virgin, en Ferrovial también se muestran tranquilos, puesto que el impago podría llevar al aeropuerto a retener las aeronaves.
Mariano Tomás
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