Para una vez que los argentinos tenemos razón. La frase de uno de los reclamantes en el caso Aerolíneas Argentinas (ARSA) en relación a la pésima, y presuntamente delictiva, actuación de Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual (Marsans) en Aerolíneas Argentinas se encarnó en la mañana del miércoles en Madrid, en boca de la presidenta argentina Cristina Fernández. En efecto, en este caso hasta doña Cristina F. de Kirchner tiene razón: la gestión de Marsans fue calamitosa y puso al transporte aéreo argentino, vital en aquel país, contra las cuerdas, a pesar de que el Gobierno Aznar les había regalado ARSA y les había donado 758 millones de euros para reflotarlo, los hombres G no sólo hundieron Aerolíneas sino que, además, tienen pendiente, en el Juzgado 35 de Madrid, al que se refiere la señora de Kirchner, tres imputaciones por desvío de fondos públicos, estafa procesal y delito fiscal, en este último caso con un informe de la agencia Tributaria que cifra la elusión fiscal en más de 100 millones de euros. Ese es el sumario al que se refiere la presidenta argentina y que silencia la prensa española.
Miriam Prat
miriam@hispanidad.com
