Es costumbre habitual meter a todas las religiones en el mismo saco. Los fanáticos religiosos, últimamente musulmanes, tienen todo de fanáticos y nada de religiosos puesto que usan el nombre de Dios para sus fechorías como si Dios les pudiera comunicar una licitud imposible.

Sr. Director:

Los cristianos debemos soportar discriminaciones laborales, belenes proscritos, crucifijos depuestos, burlas hacia Cristo, la Virgen o el Papa desde el mundo artístico, de la moda o del espectáculo y de la comunicación, y hechos tales como la prohibición del acceso a una mujer al Valle de los Caídos por llevar un rosario, porque según el Guardia Civil: "La cruz es un símbolo de provocación", o la destrucción del Vía Crucis que va a Javier, en Navarra.

Los cristianos  son más que nunca mártires silenciosos y la religión católica el camino que nos salva del odio y de todos los opios cuando aprendemos a mirar el mundo con los ojos de ese Dios-Amante tan desconocido.

Ana Coronado

corana22@gmail.com