El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes la remisión a las Cortes del proyecto de Ley sobre la Comercialización a distancia de servicios financieros. El objetivo es proteger al consumidor, ofreciendo más seguridad, adaptando nuestra normativa a la existente a nivel comunitario. Según ha explicado la vicepresidenta habrá más transparencia y mayor protección contra el fraude por el uso de las tarjetas de pago.
La reforma esencial consiste sin embargo en que el usuario puede rescindir su compra en el plazo de 14 días naturales sin tener necesidad de explicar los motivos de su rescisión y sin penalización alguna. El plazo se ampliará a los contratos de seguros, pero no se aplicará ni a los fondos ni a las acciones debido a las fluctuaciones de precios que se pueden producir en ese periodo. Tampoco se aplicará el derecho al desistimiento en el caso de los viajes.