Los bancos y hoteles norteamericanos se aprovechan del turista europeo
El puente del 1 de mayo ha representado un éxodo de españoles hacia Estados Unidos, uno de los destinos de moda. La publicidad de las agencias aconseja viajar a Norteamérica por aquello de la caída del dólar frente al euro. Y es cierto, sólo que los cambios oficiales poco tienen que ver con los reales. Por ejemplo, la banca española ofrecía un cambio de 100 euros por 153 dólares, pero si el incauto cambió en Nueva York, un banco le ofrecerá sólo 144 dólares, en el mejor de los casos, con un 141 en casas de cambio y 134 en los hoteles.
En resumen, que la comisión de canje de los intermediarios neoyorquinos es muy superior a la de los europeos. Y lo curioso es que los primeros acusan a los segundos de falta de competencia y de que todos los bancos ofrecen lo mismo, lo que revela un oligopolio de hecho. Puede que haya oligopolio, pero el resultado es que ofrecen al consumidor más dólares por los mismos euros. Si la competencia consiste en carestía, muchos se quedarán con el monopolio.