La siguiente presentación circula por Internet denuncia la situación de Villa PSOE. El escándalo se acentúa en plenas elecciones gallegas, ya que afecta al vicesecretario general del PSOE, José Blanco, y a varios dirigentes del PSOE y del PS de G. La culpa, según Pepiño, ya se sabe que es del PP. El número dos del partido dice a quienes le quieren escuchar que es una víctima más de la construcción de casas en la Isla de Arousa a menos de 100 metros del mar, violando la Ley de Costas. Al tiempo, porque Blanco podría acabar encontrando una relación entre Bush y Arousa. Por ahora, simplemente amenaza a los periodistas que publiquen noticias sobre la casiña, a pesar de que existen denuncias presentadas ante la Fiscalía contra la urbanización Cabo Deiro-O Furado.
No conviene que estas cosas se sepan en plena campaña electoral gallega, sobre todo cuando el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, ha evitado responder claramente sobre los gastos desorbitados de su gobierno en material y, sobre todo, en automóviles. Hasta el momento, Pérez Touriño ha seguido la estrategia de Blanco tras salir a la luz los cuatro coches oficiales que compró para él solito. De ellos, uno, el conocido popularmente como Audi Force One, costó 480.000 euros.
