Cada empleado llevaría su antigüedad "en su mochila", explica gráficamente Claudio Boada Primero fue el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, quien pidió que se emprendiera una reforma laboral que no fuese abaratar el despido. ¿Entonces? MAFO hablaba de la necesidad de flexibilizar el actual sistema de medición de la antigüedad del trabajador. Para empresas con trabajadores 'antiguos', supone un pasivo laboral espectacular. No se contabiliza, pero está ahí. Para los trabajadores permitiría mucha mayor movilidad. Podrían cambiarse de empresa sin necesidad de colocar su contador a cero.
El modelo ha sido impulsado por la OCDE y ya está aplicándose en Austria, y países nórdicos. ¿Cómo se haría? Se podría hacer un fondo financiado por los empresarios con cargo al seguro de paro que empezase a funcionar en el momento x que fuese acumulando derechos en caso de despido. De esta manera no supondría una carga adicional para el empresarios ni una pérdida de derechos para el trabajador. La propuesta está encima de la mesa y desde el Círculo están convencidos de que hay que insistir en la necesidad de reformas. En esas están: en insistir.