Y con los nuevos presupuestos se incrementa la partida destinada al Ministerio de Cultura (¿cultura?) y por ende, me imagino, a las subvenciones al cine español. Ese maravilloso cine que refleja fielmente la sociedad española en su modernidad, talante y "buen rollito".
Tenemos de nuevo a Almodóvar en la brecha disputándose con Amenábar el Oscar de Hollywood. Ahí es ná. Debe de estar también por ahí un tal Garci, conocido en su casa a las horas de comer, pero a ese no lo tengo en cuenta porque el pobre ha comentado en la tele que ha invitado al estreno de su última película al Gobierno en pleno y no va a asistir ninguno. Mal augurio chaval.
Bueno, el caso es que yo no entiendo que ese peliculón que dirigió Almodóvar, titulado "La mala educación", encaminado al logro de los mas altos galardones cinematográficos, recientemente estrenado, con un elenco de actores archiguay, unas críticas que para sí quisiera Spielberg y una temática actual exquisitamente tratada, lo esté vendiendo en DVD junto a "El País" a menos de seis euros. Degradante, ¿no? Las películas de Walt Disney se hacen desear mucho más. Pero también son infinitamente más taquilleras. Ese es el éxito de Almodóvar y sus amiguitos.
Concepción Rivero
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