Sr. Director:

A pesar de los augures del pesimismo poco amigos de la religión, el número de católicos, diócesis y sacerdotes incluidos, han experimentado un aumento global en todo el mundo, sobre todo en Asia y en África.

La Iglesia se renueva, y mientras, Dios va pasando por los continentes siglo tras siglo difundiendo la belleza de su doctrina a través de su Iglesia.

En la vieja Europa, vieja por la población y vieja por las ideas, el abandono de la religión por la idolatría del egoísmo, de la impureza o del bienestar ha tomado el relevo con una consecuencia: almas cada vez más alejadas de la luz de la Verdad y como perdidas en la impotencia del desamparo de ya no tener al Dios de Amor como padre y sustento de la vida.

Eva María Catalán

mariacatala6@gmail.com