Sr. Director:
Considero que harán falta al menos 5 años o quizás una década para hacer un juicio de valor con credibilidad, sobre cuál de las dos políticas monetarias, las de los 3 primeros países o la del viejo Continente han resultado más efectivas para hacer frente a la crisis.

 

El contraste entre ambos grupos es significativo, los Bancos Centrales de los EE.UU-JAPÓN-UK, han sido pirómanos activos, y posteriormente bomberos activos, el B.C.E. ha sido pirómano pasivo, para luego actuar como bombero neutro.

La realidad es que a EE.UU. le sustenta todo el mundo financiero: la pobre Europa está abandonada a su suerte. Con el bono americano a 10 años a 1.95% y el de a 30 años al 3.11%, ¿qué podemos hacer los Europeos, excepto Alemania, en este país con el bono a 5 años en mínimos de su historia al 0,593%, insoportable para el resto de sus socios Europeos?

El rally americano ha sido debido en parte a la operación Twist, una medida insostenible y que podría ser retirada en el futuro, finalizó a últimos de abril y estamos esperando acontecimientos.

Estamos pasando por una etapa de represión financiera, la FED mantiene tipos bajos de forma artificial con el objetivo de aumentar los deudores, aunque son los acreedores los que están pagando un elevado precio por ello. Nos guste o no es la solución que ha encontrado para lidiar con el exceso de deuda y al mismo tiempo promocionar el crecimiento.

La FED podría subir tipos antes de lo previsto en 2013. Muchos programas estarán a punto de expirar, por ejemplo, en enero 2013, el nuevo Gobierno que salga de las elecciones y el Congreso deberían haber alcanzado un acuerdo sobre los recortes automáticos en el gasto: las Autoridades solo dispondrán de 8 semanas entre comicios con una fecha límite para el acuerdo.

EE.UU. ha utilizado la expansión cuantitativa al objeto de ampliar la cantidad de dinero que permitieran el aplanamiento de las curvas de tipos de interés a largo plazo, mientras que en Europa se aprovecha solo para mejorar la trasmisión de los mercados interbancarios, hoy en día en un total letargo.

La fortaleza del mercado de bonos estaría basada en la especulación que la FED tiene preparada una nueva QE3, pero con los datos de empleo del viernes ultimo y la inflación controlada resta potencial alcista a la parte alta de la curva y deja solo a la FED como elemento comprador claro en su operación Twist.

El jarro de agua fría se confirmo el viernes con una tasa de paro del 8.1%: no veo ninguna posibilidad a una nueva QE3, y aunque crean que peco de pesado el mercado del bono y la curva de tipos determinan muchas de las actuaciones del mundo financiero con las repercusiones en las políticas monetarias.

Japón utiliza la política expansiva en una onda similar a la americana, su Banco Central está ante el siguiente dilema:

1º Ampliar la compra papel público por 5TR y no extensión en el tiempo.

2º Compras entre 5-10 TR sin extensión del tiempo.

3º Compras entre 5-10 años extensivas 3 años. Veo muy factible la tercera porque el Índice Nikey lo está pidiendo a gritos para superar el 10.000.

Sus problemas se acrecientan por los efectos perniciosos que el cierre de sus 54 reactores nucleares, que suponían el 30% de la electricidad utilizada, se decantan por las renovables, energía limpia pero muy cara, hay que reconocer que tienen valor a raudales para el apagón nuclear.

Mientras, en Europa, seguimos mareando la perdiz con la conferencia de prensa del Presidente del BCE en Barcelona, decepcionante, soltando el mismo rollo de la inflación, cuando el problema de falta de crecimiento es dramático.

Los flujos de capital siguen saliendo de España porque nuestra política fiscal es muy restrictiva: la política monetaria debe ser más eficaz, no hace falta inyectar más dinero:  se trata de utilizarla mejor, con compras directas de bonos en los mercados hasta acabar la deflación de activos.

Mientras, nuestro ministro De Guindos es como un boxeador en el medio del ring: por una parte le pegan Alemania-Bruselas-BCE-FMI; por la otra Santander-BBVA-PSOE etc. tiene que hacer equilibrios en el alambre para mantenerse en pie, pero este tema será cuestión de analizarlo otro día.

Federico Sáenz de Santamaría