Hace bien el Gobierno Rajoy en acelerar los procedimientos de desahucios privados. Si un inquilino tiene problemas para pagar el alquiler al propietario, éste puede decidir flexibilizar su postura y no dejarle en la calle, esperar hasta que pueda satisfacer su deuda. Pero eso corresponde al particular, no al cliente.

Lo que no puede hacer el gobernante es facilitar la actitud del moroso que no quiere pagar su deuda y que se refugia en mil recovecos legales para no pagar… que es lo que hoy sucede en España. ¿Desahucios rápidos? Sí, en defensa del derecho, vital, a la propiedad privada.

Una de cal y otra de arena. El Gobierno Rajoy pretende, presionado por las multinacionales de la automoción, endurecer las condiciones de la inspección técnica de vehículos (ITV). De esta forma -piensan los Volkswagen, Citröen, Renault, Ford, Opel y compañía- se obligará a retirar automóviles y a que los propietarios compren coches nuevos.

Miren ustedes las ITV son una mamandurria estatal, concesiones públicas a empresas privadas que cobran un buen precio por no hacer nada. La revisión periódica es cada vez más cara y las empresas tienen una clientela asegurada, forzosa, que debe pagar un precio creciente por un servicio innecesario (ahora, con la subida del IVA, más creciente).

Freír a multas al usuario por un servicio innecesario no constituye una defensa de la propiedad privada sino un atentado contra esa propiedad, consistente en una propiedad privada forzosa: forzar al usuario a cambiar de coche en plena crisis.

Eulogio López

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