Aunque parezca una hipérbole, la figura de Arturo Mas cada día más me recuerda a Moisés.
El Sr. Mas, al igual que Moisés, vivió durante bastante tiempo confortablemente acomodado en los sillones del poder establecido.
En cierto momento, Moisés, para conseguir el líquido elemento imprescindible para la supervivencia de su pueblo en el desierto, golpeó con su báculo una roca y de ella manaron varios manantiales.
De igual manera, el Sr, Mas, en busca de la liquidez financiera, que le permita sobrevivir en sus desérticas arcas, golpea inmisericordemente a la sociedad catalana con impuestos desmesurados e irracionales, cuando no, con bajada de suelo o despido de empleados públicos, al tiempo que exige el maná del opresor Gobierno Central.
Si que encuentro una pequeña e importante diferencia entre ambas figuras; mientras Moisés, en su equipaje sólo disponía de un báculo, el Sr. Mas, parece ser que, oculta en el fondo de sus alforjas dispone de una excelente navaja multiusos; naturalmente suiza.
Manuel Villena Lázaro