El actual presidente está obligado a apoyar a ZP porque guarda en el armario el cadáver de Aerolíneas Argentinas

No es una batalla política, aunque Díaz Ferrán ya tiene en vistas su reelección al frente de la patronal CEOE. Hay diferencias de concepto: el sucesor de José María Cuevas nunca se entenderá con el secretario general, Juan Jiménez Aguilar -aunque le obligaron a mantenerle en el cargo, porque para Ferrán la patronal es un lobby de poder donde las grandes empresas, en representación de todas- sacan provecho para ellas -y para nadie más- de su posición de interlocución con el Gobierno. Para Jiménez Aguilar, el verdadero empresario es el empresario pequeño, y esa brutal diferencia se deja ver, por ejemplo, en las reivindicaciones fiscales, que a Ferrán le preocupan poco. A los de el lobby sólo les preocupan las subvencione del Estado y que el Gobierno les defienda en el exterior. Por eso alaba a Solbes, entre otras cosas porque el Gobierno sabe que Ferrán guarda en el armario un cadáver llamado Aerolíneas Argentinas.

Por ello, ya está en marcha la alternativa a Díaz Ferrán. Está formado por el Presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Santiago Herrero, apoyado por el secretario general y vicepresidente Jiménez Aguilar. Alianza entre un sevillano y un malagueño para desbancar a Ferrán, un hombre que ha utilizado la palanca de la CEOE como instrumento para sus negocios privados a través de Marsans.

La candidatura Herrero-Jiménez va por buen camino porque a muchos empresarios, grandes y pequeños, empieza a molestarles las alabanzas de Ferrán a Pedro Solbes y la política económica gubernamental. Y es que Ferrán tiene un cadáver en el armario, que no es otro que Aerolíneas Argentinas, y el PSOE tiene toda la información. Por ejemplo, el PSOE ha ocultado el peritaje de la Agencia Tributaria, en el que se concluye que Ferrán y su socio, Díaz Ferrán, defraudaron a Hacienda 100 millones de euros, y en el que están imputados por desvío de fondos públicos y estafa procesal.