El Consejo de Ministros aprobó este viernes el Plan de Modernización de la Justicia 2009-2012 con una dotación presupuestaria cercana a los 600 millones de euros. A eso habría que añadir el incremento del gasto corriente como consecuencia de un incremento sustancial de la plantilla. Las claves son las siguientes: incremento de 250 jueces anuales, la creación del juez comodín y, por lo tanto, la limitación de los jueves suplentes. Por lo demás, informatización e interconexión de las bases de datos de las CCAA. A todo esto hay que añadir la nueva Oficina Judicial, actualmente en el Senado. Toda una revolución en la organización de los juzgados. El juez no será el jefe de la Oficina Judicial, se limitará a instruir y juzgar. Sus funcionarios y su sala de vistas son compartidos con otros juzgados con una mayor racionalización del servicio público de Justicia, que es el término que prefieren De la Vega y Caamaño. La justicia vista como un servicio más que como un poder. Según Caamaño, las reivindicaciones de las asociaciones judiciales han quedado reflejadas en el plan.
Aún así, la Asociación profesional de la Magistratura mantiene su convocatoria de huelga para el próximo 2 de octubre a la espera del resultado de una reunión con el ministro para la semana que viene. La APM se muestra escéptica respecto a los compromisos del gobierno, pero Caamaño lo tiene claro: Si ellos quieren parar a la sociedad, tendrán que ser ellos los que expliquen las razones; nosotros no nos vamos a parar. Desde el ministerio se sostiene que detrás de la huelga de la APM no hay intereses profesionales, sino políticos y sobre todo de nombramientos. Y es que en octubre están previstos muchos cambios en la cúpula judicial.