La raíz de todos los males es la avaricia, esta lleva a la corrupción que conduce el adulterio crónico y primer deporte nacional, sobre todo en América Latina.
Esto son las fuerzas más poderosas, para destruir la familia y la sociedad, que tiene el enemigo de Dios y del hombre ¡Satanás! Como funciona, la avaricia por los poderosos, cuando son tentados a ganancias ilícitas o comisiones fraudulentas. Decir sí, es una verdadera droga sin salida y aumentando sin cesar, porque el que hace el mal es esclavo del mal.
El adulterio crónico, está casi totalmente generalizado desde que la mujer salió del hogar a competir con el hombre. El trato suele ser más amable que con los propios maridos, estos agobiados por tantos problemas de la familia, suelen pronto perder, las delicadezas del amor y del noviazgo, que las mujeres no pierden, cualquier insinuación del jefe, del cartero, o cualquier otro a su ego que recibe con satisfacción, la sensualidad que imprime Satanás, es muy superior a la de su marido en el acto sexual, y el adulterio es ya un hecho, aunque solo sea de deseo.
Comienza la cadena de recibes lo que das, y pronto el marido seguirá el mismo juego fuera del hogar… cuernos mutuos.
El número de separados, y viviendo fuera del matrimonio, en América latina supera el ochenta por ciento.
Este adulterio crónico tiene tanta fuerza y tanto engaño, que separa a madres de los hijos, se trasladan de unos países a otros, por las relaciones pecaminosas que se dan por internet. Los regustos que infiere Satanás se confunden con el verdadero amor, para despreciar al esposo o esposas en todo. Dándose el caso, que al mismo tiempo en ordenadores diferente, están los dos esposos chateando y diciendo cosas, que no se las dicen a la mujer, besándose por cámara y enseñándose las partes íntimas, llegando a orgasmos que no llegan jamás con su pareja legal, para confundirlos más y terminar en el desastre en este mundo y luego como hijos de Satanás por toda la eternidad, hasta hacerse diablos y odiar a Dios, que es el único fin del que es solo odio eterno.
Esto es lo que es aunque se piense al revés, en la doctrina cristiana revelación del Hijo de Dios, está todo ello bien claro, más en San Pablo con sus cartas, escogido por Dios para enseñar el camino de la salvación a los no judíos.
Así es el mundo hoy de las nuevas tecnologías, inventadas por Satanás, más para el mal que para el bien, que también valen pero menos, son el anzuelo con el bien para llegar al mal, ángel de luz cuando lo necesita para engañar mejor.
Sigan los hombres y mujeres haciendo el imbécil fuera de su terreno, al final todo es una ilusión errada, que primero destruye al que la genera y luego a sus familiares, para influir también en toda la sociedad. La prueba a la vista está sobre todo con la cantidad de niños sin hogar y con un solo padre, o estos de diferentes matrimonios.
Isidro García Robles