• Ciertamente, ACS reduce deuda, pero las ventas anuales de la filial australiana se reducirán en 2.500 millones de euros y su cartera de pedidos bajará en unos 3.600 millones.
  • Además de desinvertir, las constructoras españolas se han visto obligadas a buscar negocio fuera de nuestro país.
  • ACS se hace con el contrato del primer AVE de Estados Unidos, por 1.000 millones de euros.
  • FCC Aqualia entra en Qatar para el saneamiento de agua, un contrato de 300 millones de euros.
  • Y Ferrovial firma un acuerdo con la británica Affinty Water por unos 165 millones de euros.

El proceso de desapalancamiento de ACS continúa. No queda más remedio. Si el pasado miércoles hablábamos de amortizar deuda aún con cargo a la cuenta de resultados, este viernes tenemos que contar que ha vendido la constructora John Holland, filial de la filial australiana Leighton, aunque esto supondrá una merma en el negocio.

En concreto, Leighton va a ingresar 770 millones de euros, que es la cantidad que pagará el grupo China Communications Construction Company (CCCC) por John Holland. Hasta ahí, bien. La cifra no está mal.

¿Qué ocurre Que la venta de esta filial va a significar una caída del negocio de Leighton. Lo ha reconocido la propia compañía en el comunicado remitido este viernes. Las ventas anuales de la filial australiana se reducirán en 2.500 millones de euros y su cartera de pedidos bajará en unos 3.600 millones.

Pero no queda más remedio que vender. Según el consejero delegado de Leighton, Marcelino Fernández Verdes (en la imagen), "la venta de John Holland demuestra el esfuerzo que la compañía está realizando para ejecutar nuestra estrategia tendente a fortalecer el balance, racionalizar la estructura y optimizar la gestión".

Además de desinvertir para achicar deuda, las empresas constructoras y de servicios de nuestro país han tenido que salir fuera para buscar negocio. Y lo están consiguiendo. La misma ACS ha comunicado este viernes que se hecho -junto con dos constructoras locales- con el contrato del primer AVE de Estados Unidos -unirá Los Ángeles y San Francisco- por unos 1.000 millones de euros.

También este viernes, FCC Aqualia ha anunciado que se ha adjudicado un contrato de saneamiento de agua de Al Dhakhira (Qatar), por 300 millones de euros. Es el primer contrato de la española en el emirato catarí y completa su presencia en la zona. FCC ya está en Arabia Saudí y en Emiratos Árabes Unidos.

Y Ferrovial, a través de su filial Amey, llevará a cabo la instalación de nuevos contadores y tareas de mantenimiento para la compañía británica de agua Affinity Water, por unos 164,6 millones de euros.

Todo esto está muy bien. El problema del negocio fuera de España es que aporta un margen muy pequeño. Pero menos da una piedra… y más daño hace.

Pablo Ferrer

pablo@hispanidad.com