• El comité competente en materia de asentamientos aprobó la construcción de 566 nuevas viviendas, informó el vicecalcalde de Jerusalén, Meir Turjeman.
  • Nabil Abu Rudeineh, portavoz del presidente palestino Mahmoud Abbas, consideró que ese paso es un "desafío abierto" a la ONU.
  • La resolución aprobada el 23 de diciembre por el Consejo de Seguridad exigía a Israel que cesara la construcción de asentamientos en territorios ocupados.
  • La comunidad internacional considera ilegales los asentamientos en Cisjordania y Jerusalén Oriental, así como un obstáculo para la paz.
En espera de una actitud más favorable a su política por parte del nuevo presidente estadounidense Donald Trump, con quien el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, habló por teléfono, Israel sigue impulsando la construcción de asentamientos en la ocupada Jerusalén Este, informa La Nación. El comité competente en materia de asentamientos aprobó ayer la construcción de 566 nuevas viviendas, informó el vicecalcalde de Jerusalén, Meir Turjeman, en su cuenta de Facebook. Nabil Abu Rudeineh, portavoz del presidente palestino Mahmoud Abbas, consideró que ese paso es un "desafío abierto" a la ONU. "Exigimos al Consejo de Seguridad una rápida reacción en base a la resolución 2334 para poner fin a la política extremista del gobierno israelí, que destruye la solución de dos Estados." Rudeineh se refería a la resolución aprobada el pasado 23 de diciembre por el Consejo de Seguridad exigiendo a Israel el cese de la construcción de asentamientos en territorios palestinos ocupados, incluyendo la parte oriental de Jerusalén. La decisión de Israel llega dos días después de la investidura de Trump, de quien Israel espera más apoyo en su política de asentamientos. "Los últimos ocho años fueron difíciles con la presión del gobierno de (Barack) Obama para congelar la construcción" de asentamientos, dijo el alcalde de la ciudad, Nir Barkat. Debido a esa presión se congeló con frecuencia la autorización de construcciones a nivel nacional o se retrasó la presentación de nuevos planes, señaló. "Estamos entrando en una nueva era en la que podremos continuar construyendo y desarrollando la ciudad en beneficio de todos", añadió. Un portavoz del gobierno palestino dijo que cualquier decisión de anexionar territorio palestino será visto como una "grave escalada" del conflicto, informó la agencia de noticias Wafa. Israel conquistó el este de Jerusalén en la Guerra de los Seis Días de 1967 y después anexionó ese territorio, que los palestinos ven como la capital de un futuro Estado independiente. La comunidad internacional considera ilegales los asentamientos en Cisjordania y Jerusalén Oriental, así como un obstáculo para la paz. Casi 600.000 israelíes viven en 125 asentamientos en territorio ocupado, a los que se suman 100 asentamientos no regulados, que el gobierno quiere legalizar en el futuro. Sólo en Cisjordania la cifra de colonos se multiplicó por tres o más desde el inicio del proceso de paz de Oslo en los años 90, que debía llevar a la creación de un Estado palestino. Andrés Velázquez andres@hispanidad.com