• El segundo banco suizo perdió 2.285 millones de euros en 2016 por multas y caída de negocio.
  • Sigue adelante con su drástico recorte de empleo: en 2017 habrá otros de 5.500 despidos.
  • Credit Sisse tuvo que provisionar más de 2.000 tras su arreglo en EEUU por la crisis de las subprime.
  • Y a eso se une la debilidad de su división estrella, gestión de patrimonios, por la retirada de fondos.
El primer banco suizo, UBS, cerró un mal ejercicio en 2016, y el segundo, Credit Suisse, todavía peor. En los dos casos por la misma razón: las multas y el peor comportamiento de uno de sus nichos de negocios, la gestión de patrimonios e intermediación. Así la cosas, las pérdidas de Credit Suisse asciende a ascendieron 2.285 millones de euros, más de los esperado por los analistas y suma ya dos años en números rojos. Obviamente, ahí constan las provisiones realizadas en el cuarto trimestre por su responsabilidad en la crisis de la subprime (2.034 millones de euros) tras el acuerdo con el Departamento de Justicia de EEUU. Pero también por el empeoramiento de márgenes. La cifra de negocio cae un 14,6%, hasta 19.049 millones de euros. La explicación está en las salidas de fondos por la retirada de efectico de los clientes en su división de gestión de patrimonios. El consejero delegado de Credit Suisse, Tidjane Thiam, se ha referido al recorte de gastos puesto en marcha en la entidad, por un lado, que seguirá adelante con un recorte de plantilla de 5.500 personas en 2017. Un suma y sigue respecto a 2016 (7.250 despidos). Y sobre el otro punto, la división de patrimonios, Thiam ha avanzado que ya se ha notado un cambio de tendencia (a positivo). Por otro lado, el grupo suizo ha confirmado su intención de sacar a bolsa entre un 20% y 30% de su negocio suizo, cuestionado por algunos analistas debido al momento de los mercados. Rafael Esparza