La Agencia Internacional de la Energía (AIE) ha lanzado una advertencia al Gobierno, sobre todo, a la vicepresidenta cuarta y ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera. Y es que en su informe ‘Spain 2021: Energy Policy Review’, ha señalado que debería vigilar la situación financiera de las nucleares para evitar su cierre imprevisto antes de lo acordado (entre 2027 y 2035).

Esta organización internacional, creada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) tras la crisis del petróleo de 1973, tiene actualmente 30 estados miembro y acaba de publicar su revisión del sistema energético español y su evolución desde su anterior informe que se publicó en 2015. En esta ocasión destaca el excelente funcionamiento de los siete reactores españoles y su importante aportación, y llega una semana después de que Ribera pusiera fin a la sobrerretribución por no emitir CO2, que afecta a plantas nucleares, hidráulicas y eólicas anteriores a 2005.

La AIE considera que el Gobierno debería revisar la fiscalidad sobre la electricidad. ¿Las razones? Para evitar cargos excesivos e impactos distorsionadores respecto al consumo de gas e hidrocarburos para promocionar la electrificación de la economías

La AIE subraya que los reactores españoles están actualmente operando a pérdidas debido a la alta fiscalidad que sufre la energía nuclear en nuestro país y a los bajos precios del mercado mayoristo. Por todo ello, considera que esta situación podría provocar que cerrasen antes de lo acordado y que deben vigilar que no sea así, porque podría deteriorar significativamente la seguridad del suministro de electricidad.

Asimismo, la AIE recomienda que se impulse la implementación de la estrategia para la gestión final de los residuos radiactivos, incluyendo el Almacén Temporal Centralizado (Enresa prevé que esté para 2028, pero debe buscar un nuevo emplazamiento tras descartarse Villar de Cañas) y un Almacenamiento Geológico Profundo. De esta forma, se evitaría aumentar innecesariamente los costes de desmantelamiento. Además, pide el desarrollo de proyectos que faciliten la conservación y la transmisión efectivas del conocimiento y la experiencia aprovechado la infraestructura técnica y los trabajadores altamente cualificados del sector, así como considerar la utilidad de la energía nuclear, teniendo en cuenta sus aplicaciones distintas a la producción de luz para lograr una neutralidad climática en 2050.

Paralelamente, la AIE considera que el Gobierno debería revisar la fiscalidad sobre la electricidad, en línea con la petición de PP, Vox y Cs. ¿Las razones? Para evitar cargos excesivos e impactos distorsionadores respecto al consumo de gas e hidrocarburos para promocionar la electrificación de la economías. Es decir, parece que no ve bien la nueva tarifa con tramos horarios, por mucho que Ribera diga que así la factura será más barata, ni tampoco el Fondo Nacional de Sostenibilidad del Sistema Eléctrico (FNSSE), con el que dice que la factura bajará un 15%, pero que perjudica sobre todo a las petroleras.