“La Unión Bancaria se ha quedado parada, se ha paralizado”, afirmó Gonzalo Gortázar este martes, durante el 20 Encuentro Bancario organizado por el IESE y FTI Consulting. “Llevamos diez años parados y eso no puede ser”, se quejó el banquero.
Los argumentos no han cambiado. A saber, las distintas normativas de cada país, los distintos supervisores, incluso los distintos marcos laborales, hacen inviables las fusiones transfronterizas a pesar de la insistencia del BCE.
Sea como fuere, el optimista Gortázar cree que ha llegado el momento de reactivar este viejo sueño ya que las condiciones han cambiado respecto al pasado, cuando las reticencias del norte de Europa respecto a los bancos del Sur paralizaron cualquier intento de Unión Bancaria.
Lo mismo sucede con el mercado de capitales e inversiones: lograr un mercado único europeo se antoja improbable, según Gortázar, por las reticencias de los países a ceder parcelas de soberanía, por pequeñas que sean.
Como hizo Escotet anteriormente, el CEO de Caixabank también se quejó del peso de la regulación. Un ejemplo: el informe anual de sostenibilidad del banco ha pasado a ocupar 600 páginas (2024) frente a las 50 que tenía pocos años atrás. “Sí es verdad que nos hemos pasado un poco”, señaló.











