Doce años y medio: eso es lo que ha durado oficialmente el pacto parasocial formalizado el 27 de julio de 2006 y finiquitado el lunes 24 de diciembre por la tarde mediante un hecho relevante remitido a la CNMV. El Sabadell da por terminado así el pacto firmado en su día por Josep Oliu Creus, Miguel Bosser Rovira, Héctor María Colonques Moreno, Joaquín Folch-Rusiñol Corachan, José Manuel Lara Bosch, Isak Andic Ermay y Enrique Bañuelos de Castro, con el fin de proteger su inversión en el banco frente a posible inversores que pudieran llegar.

Pero lo que llegó fue la crisis financiera que lo cambió todo. También ese núcleo duro inicial, que dejó paso a otro más internacional, con el mexicano David Martínez y el colombiano Jaime Gilinski, cada uno con el 5% del capital. El nuevo núcleo duro llegó a controlar el 20% del banco pero no tuvo continuidad. Como se diría ahora, no era sostenible, y Oliu dejó de creer en él.

Del pacto inicial firmado en 2006, el único accionista que permanece es Oliu, con un 0,15% del capital

De hecho, en 2017 y con motivo de la ampliación de capital para adquirir el británico TSB (1.600 millones de euros), ‘cambió’ el núcleo duro por fondos de capital riesgo, algo que, por otra parte, gusta mucho más al BCE. En Fráncfort, que son muy listos, hablan de profesionalizar el núcleo duro, como si los Lara, Andic y compañía no lo fueran. En cualquier caso, desde entonces, los accionistas de referencia son Blackrock (5,3%), Norges Bank (3,1%) y Coltrane Master Fund (1%), junto a Fintech Europe (3,1%), el vehículo de inversión del mexicano Martínez. Del pacto inicial firmado en 2006, el único que permanece es Oliu, con un 0,15% del capital.

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El presidente del banco afronta, ahora sí, la hora de la verdad: comer o ser comido. Como adelantó Hispanidad, Oliu, que pretende retirarse cuando cumpla 75 años -ahora tiene 69-, busca a Bankia pero José Ignacio Goirigolzarri solo tiene ojos para el BBVA. Mientras, Santander afronta un 2019 centrado en la completa integración del Popular, ERE incluido, y Caixabank enfocado en su plan Estratégico 2019-2021, también con cierre de oficinas y ajuste de plantilla.

El baile ya se ha reanudado con la pareja Unicaja-Liberbank. No será la única operación ni la más grande.